Vea el impresionante cambio físico del narrador de Teletica que bajó 16 kilos

Daniel Quirós además se hizo un "arreglito" en la cara, razón por la cual se ve tan cambiado en tele

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Al periodista deportivo Daniel Quirós de Teletica Deportes le dicen “Chamaco”, un sobrenombre que le cae al pelo, ahora más que nunca.

Mientras muchos en esta cuarentena han dado rienda suelta a complacer sus antojos, el narrador de fútbol más bien decidió aguantarse las ganas y cerrar la boca para las comidas tentadoras y que engordan.

La voz oficial del famoso “a lo que vinimos” decidió aplicar su frase y someterse a una dieta para bajar de peso hace dos meses y medio pues asegura que se veía bastante cachetón.

El comunicador, de 48 años, nos comentó que él entendió que un hombre también puede hacerse unos arreglitos estéticos y pensar en su salud.

– ¿Cuánto ha bajado de peso?

Ya he bajado 16 kilos y ha sido por decisión propia, no porque esté enfermo. Yo ya había hecho la dieta Keto antes y decidí volverla a hacer junto a mi novia.

– ¿De qué trata esa dieta?

Esa dieta se basa en eliminar el consumo de carbohidratos, harinas, azúcar y lácteos. Y solo se comen proteínas, vegetales, ensaladas. Además es válida la grasa, de alguna manera. Eso lo hice con una nutricionista.

– ¿Hace cuánto hizo su primera dieta?

Hace dos años y me había funcionado superbién, ya que había bajado un montón pero después entré en un periodo de vagancia y empecé a comer chatarra debido a los horarios de trabajo y viajes fuera del país, por lo que volví a subir un montón de peso. Estaba en 76 kilos y decidí volver a bajar porque ya son 48 años y a parte de eso ya estaba muy cachetón.

– ¿Cuándo empezó con ese proceso?

Empecé justo cuando cayó la pandemia, cuando todo el mundo comenzó a comer y a engordar, yo empecé a sacrificarme y a comer superbién porque esa dieta lo obliga a uno a comer muy sano y a tener meriendas en horarios muy establecidos. Es duro porque uno deja de comer toda la comida chatarra y cosas deliciosas, así que me tocó decirles adiós.

– ¿Y ha logrado bajar tanto peso solo a punta de dieta?

Yo siempre he hecho mucho ejercicio, pero una vez iniciada la dieta no podía hacer ejercicio durante 22 días. Ahora estoy corriendo entre ocho y doce kilómetros diarios. De hecho, ya estoy en el periodo de transición de la dieta, por lo que le estoy metiendo un poquito de harina y carbohidratos al cuerpo.

– ¿Se le hizo difícil mantener la dieta?

Durísimo. Esta pandemia la he pasado sin comer nada rico, solo comiendo sano y eso es duro, porque este confinamiento da ansiedad y dan muchas ganas de comer. Creo que fue más difícil porque en momentos en que todo el mundo come rico yo dejé de comer prácticamente. La salvada es que mi novia también estaba haciendo otra dieta y nos apadrinamos. Claro, la mía era más dura porque ella sí podía comer harinas y yo no. Tuve que olvidarme de las hamburguesas, del pollo frito, de la pizza, de los caramelos, los chocolates y de los helados.

– ¿Por qué decidió hacerse un arreglito estético?

Como perdí tanta grasa en el cuerpo, el cuello me quedó superflácido, la papada me guindaba, en la frente desde pequeñillo siempre tuve una arruga y al no tener grasa, la arruga se me marcaba de lado a lado y ya son 48 años.

– ¿Qué hizo después?

Por medio de Marilín Gamboa contacté a Mediclinic NyD y decidí hacerme un tratamiento de tensado en el cuello y cuidarme algunas líneas de expresión y como diría Ignacio Santos: “me resultó formidable”. Me lo hice hace como 22 días.

– Son poco los hombres de televisión que reconocen que se han dado una ayudita en la cara...

No tengo ningún problema en decirlo. Evidentemente uno tiene el derecho de cuidarse porque tomé la decisión de adelgazar y me quedó piel guindando y si tengo la posibilidad de tensar la piel, lo hago y lo seguiré haciendo. Más que verse bien para los demás, creo que es cuestión de sentirse uno bien y tranquilo.

– ¿Es la primera vez que se hace un tratamiento estético?

Sí, es la primera vez.

– ¿Le gustaría hacerse algo más?

Creo que me voy a hacer un par de cositas más, pero más adelante. Si me gustaría tensar un poquitico la grasa que me quedó en el abdomen, igual no es mucho.

– ¿Qué le han dicho los compañeros al verlo tan cambiado?

Todo el mundo ha notado el cambio, ellos sabían que estaba haciendo dieta, pero el vacilón es en la calle porque la gente al verme tan flaco me pregunta si es que estoy enfermo. Es que el cambio sí es muy radical, porque son 16 kilos menos.