La artista estadounidense Demi Lovato decidió hablar sobre su historia al llegar a los 28 años con el único fin de liberarse.

Su rutina diaria incluía heroína y crack, así como mucho alcohol y trastornos alimenticios que la tuvieron al borde de la muerte.

Lovato habló con honestidad sobre sus luchas y traumas personales en “Demi Lovato: Dancing with the Devil”, la serie documental de cuatro partes que se estrenó en YouTube Originals este 23 de marzo y que ya lleva más de ocho millones de reproducciones.

Con gran crudeza, la cantante detalla la violación que sufrió a los 15 años cuando era una chica Disney y el abuso de su dealer (distribuidor de droga) la noche de su sobredosis, tras seis años de mantenerse sobria y limpia de estupefacientes.

“Mis médicos dijeron que tenía de cinco a diez minutos más de vida. Si nadie me hubiera encontrado, entonces ya no estaría aquí. Crucé una línea que nunca había cruzado. Quiero dejar las cosas claras sobre lo que sucedió”, afirma Lovato cuando recuerda ese instante en el que casi muere a los 25 años.

Vida difícil.

Lovato dijo que no fueron solo las sustancias las que la llevaron a su “punto de ruptura”, sino también “traumas pasados” y situaciones que enfrentó dentro de la industria.

Tocó fondo y sobrevivió, pero hoy lidia con las secuelas físicas que le dejó esa fatídica noche en la que sufrió tres derrames cerebrales y un paro cardíaco.

Sintiéndose miserable por las restricciones y presiones de su equipo para mantenerla a raya, Lovato recuerda haber estado en una sesión de fotos y haber pensado: “Ya ni siquiera sé por qué estoy sobria”.

Esa misma noche bebió una botella de vino tinto y luego se puso en contacto con un dealer. Probó metanfetamina, que mezcló con Molly (éxtasis), cocaína, marihuana, alcohol y oxicodona. Tras ingerir todas esas sustancias, debió morir, confiesa: “Todo eso debería haberme matado”.

Su proveedor la inició en el consumo de la heroína un día que él no tenía su dosis habitual de cocaína y Xanax.

Después de su primer ingreso a rehabilitación, la artista se mantuvo sobria durante seis años, pero posteriormente, tras recaer en el alcohol, la exestrella de Disney comenzó a ingerir todo lo que estaba a su alcance.

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Violada.

En cuanto a la fatídica noche de la sobredosis, Lovato narra que había salido para celebrar el cumple de un amigo. El grupo regresó a la casa de la cantante para seguir la pachanga. Poco a poco fueron jalando los invitados, aunque con dudas sobre si hacían bien dejándola sola.

A las 5:30 a.m. Lovato les dijo a todos que se iba a dormir, pero lo que realmente hizo fue llamar a su distribuidor de droga, quien la agredió sexualmente y la dejó al borde de la muerte.

Aquella madrugada del 24 de julio de 2018, el traficante le llevó heroína adulterada con fentanilo. Se quedó un rato en su casa, la violó y se fue dejándola al borde la muerte.

”Cuando me encontraron a la mañana siguiente, estaba desnuda, azul. Me dieron literalmente por muerta”.

Su exasistente, Jordan Jackson, la encontró casi muerta.

“No creo que la gente sea consciente de lo terrible que fue en realidad. Tuve tres derrames cerebrales, un ataque cardíaco, un fallo multiorgánico y una neumonía provocada porque estuve a punto de ahogarme en mi propio vómito” detalló.

“Me quedé con daño cerebral, y todavía estoy lidiando con los efectos de eso hoy. Ya no puedo conducir y tengo puntos ciegos en mi visión”, agregó.

Al llegar al hospital, los médicos le consultaron si había tenido relaciones sexuales consensuadas esa noche. Aunque en ese momento ella contestó que sí, al hablar del tema en el documental contó con precisión cómo fue todo.

“Tuve un flash de él encima de mí. Vi ese destello y dije ‘sí’. No fue hasta un mes después de la sobredosis que caí en la cuenta de que no estaba en un estado mental como para consentir nada.

“Ese tipo de trauma no desaparece de la noche a la mañana. Habiendo puesto eso frente a la cámara y sabiendo que la gente lo ha visto, es liberador.”, dijo acerca de compartir su historia.

Lovato también compartió cuando a los 15 años fue agredida por un compañero que era parte del elenco de Disney Channel: “Cuando era adolescente, estuve en una situación muy similar. Perdí mi virginidad en una violación”.

Aunque no dio el nombre de su agresor, ella denunció que el actor la había violado, pero el agresor no tuvo ningún tipo de castigo o consecuencia por sus actos.

La artista reveló que después de la agresión, vivió un verdadero infierno: “Dejé de comer y me las arreglé de otras formas: cortándome, vomitando, lo que sea. Mi bulimia empeoró tanto que comencé a vomitar sangre por primera vez”.

Sus tatas.

En el primer episodio de la serie, Lovato habla de una relación compleja con su padre. Una situación que marcó su vida. Era adicto y maltrató a su madre y terminó distanciándose de él: “Tenerlo cerca me estaba causando más daño que bien”.

Su padre sufría trastorno bipolar y esquizofrenia y murió en 2013.

Su madre también lidiaba con abuso de sustancias y un trastorno alimenticio.

La cantante ha estado sometida a tratamiento y en estos momentos se encuentra recuperada, aunque todavía bebe alcohol y fuma marihuana.

Incluso ha sabido encontrar una explicación a aquella conducta autodestructiva.

“Adopté esos mecanismos para afrontar las cosas porque en realidad estaba pasando por mucho dolor y como no quería morirme, no sabía qué más hacer”.