Farándula

“Él nunca quiere hablar y no sé qué le pasa”

Rafael Ramos, sicólogo

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“Mi esposo nunca dice nada, se molesta, me deja de hablar por varias semanas y luego se le pasa. Él nunca quiere hablar y como no habla no sé qué le pasa. Esto me atormenta, él dice que si yo no me doy cuenta él no me lo va a decir. Es tan duro vivir así”.

"Mi esposo es de esos que nunca dice nada, se que se molesta y me deja de hablar a veces hasta por varias semanas", cuenta la lectora.

1. Esta consulta trae a relucir el tema: “El silencio en la vida de la pareja”. Es lamentable que una pareja tienda a callarse cosas y dejarlas pasar creyendo que esta es una forma de mantener la armonía. El silencio en la comunicación es como un cáncer que hace metástasis, minando poco a poco las estructuras de confianza y seguridad. Crea muros cimentados desde las fantasías negativas o dramáticas que se construyen a partir de lo que cada quien cree, piensa o siente que está pasando. ¿Por qué se da el silencio en la vida de la pareja?

2. Creer y crecer en el amor es romper estas conductas que son insanas para dar paso a personas que sean claras, abiertas y transparentes, receptivos y compresivos. Hay una premisa en el silencio evasivo, se muere el amor, pues es una agresión. Una cosa es el silencio para pensar y acomodarse y otra es la indiferencia y la apatía.

3. Él no puede dar por sentado que usted sepa qué siente, desea o añora. Cada uno tiene una responsabilidad consigo mismo de aportar lo mejor a la relación y esto implica hacer un buen autoanálisis para dejar de culpar a los otros de sus temas emocionales no resueltos y asumirlos como algo propio que debe resolver.

4. Cada uno debe trabajar en esto. El amor requiere encuentro para clarificar, escucha para comprender, apertura para trazar caminos, hacer planes y fortalecer la vida en pareja. El silencio causa dolor, los enfría, los aleja y poco a poco, fragmenta las bases del amor, creando un círculo vicioso que día a día los va separando. Esto es algo que ustedes deben trabajar y si él no quiere, empiece por usted para ver qué curso toma su vida.

Envíe sus consultas al correo ramosdeapoyo@lateja.cr (Cortesía)

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