“Me siento desconectada de mi pareja y estoy aburrida porque siento que todo le da igual, como que no le importa la relación. Todo me toca a mí y si no propongo nada, él no se mueve. Ya se lo he dicho, pero parece que no le importa. Funcionamos bien como familia, pero no como pareja. Esto me tiene muy frustrada y me da miedo porque me doy cuenta que no tengo ganas de estar con él y se lo dije, pero me respondió que es normal, que a todo mundo le pasa y que hay que seguir por la familia”.
1. La desilusión progresiva es una de las fuentes de las cuales se nutre la desmotivación y cuando esta se hace presente en una relación es posible que se empiecen a crear distancias afectivas, sexuales, comunicativas y sociales a muchos niveles que afectan las razones por las cuales están juntos.
2. Es preocupante que la respuesta de su pareja se que la desconexión emocional, el desinterés y la desmotivación son normales y que deben seguir por la familia. Este enfoque no es sano porque toda pareja tiene que estar orientada al disfrute como pareja y en segundo término como familia, pero cuando esto no se da, se crea un desbalance que abre paso a la frustración.
3. Es muy importante que una persona escuche a la otra, sobre todo cuando le dice que se están alejando, que cayeron en la rutina y ya no se sienten igual. Cuando pasa eso hay que trabajar por activar la relación, pero si la contraparte simplemente hace caso omiso, el marco de una reacción positiva se reduce mucho, ya que una relación es un tema de dos.
4. Este sentimiento de desinterés hay que trabajarlo. Ustedes deberían buscar una terapia de pareja, o al menos una terapia para usted, para que analice a fondo todo esto y, si es del caso, empezar a tomar decisiones. Usted no puede conformarse con el mito de que una relación a lo largo del tiempo se vuelve pasiva.