A Reiner Cabalceta le dicen Gasolina desde que está carajillo, pero no necesitó de un fósforo para alzar vuelo el pasado 1° de enero.
Este joven santacruceño literalmente voló después de que el toro El Cris, de la ganadería Beto León, lo mandara por lo aires con sus cuernos.
Cabalceta, quien es de los toreros más teja, se mete cada año desde el 2009 y, aunque pasa como un Cristo, nadie lo saca del redondel de Zapote.
"Ahora ando con raspones cerca del ano y en la rodilla izquierda, también se me regó el líquido de esa rodilla. En otro momento un toro me había hecho un hueco en la quijada y en las costillas", dijo el joven de 26 años.
A pesar del dolor que representan los golpazos, Gasolina no se cambia por nadie y dice que se mete por pura pasión a enfrentar a los cachudos.
"Esto es por amor al deporte. Yo quiero que la gente sepa que hay muchos toreros que no son tan conocidos y que son bastante buenos, algunos son todavía menores de edad, pero traen esa pasión por los toros", afirmó.
El improvisado espera estar presente en todas las corridas de esta temporada, incluida la de este jueves, que recibirá nuevamente a la ganadería de don Beto León.