El músico Felipe Contreras es un milagro viviente tras sufrir un derrame cerebral, un preinfarto y superar una bacteria que le entró a su cuerpo mientras estuvo internado en el hospital San Juan de Dios.
Así es como describe su hermano Giovanni Contreras, productor musical, lo acontecido con Felo, como le dicen de cariño al bajista, tras caer muy delicado al hospital en octubre del año pasado.
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El exbajista del grupo Escats, de 55 años, se encuentra ahora internado en un albergue en San Pedro de Montes de Oca, donde está recibiendo rehabilitación.
“Él ahorita se encuentra en un albergue, en donde una o dos veces por semana lo llevan al Cenare, donde sigue con la rehabilitación del brazo y la pierna izquierda que eso sí él perdió bastante movilidad de ese lado del cuerpo, por lo demás se encuentra bastante lúcido, si le dan ciertos lagunazos, a veces, que uno llama así a las desubicaciones, en donde a veces habla algunas incoherencias, pero es muy esporádico”, explicó.
Giovanni agregó que ellos ya tenían todo listo para enterrar a su hermano, pues los doctores ya les habían advertido que no sobreviviría; sin embargo, la voluntad de Dios fue otra y poco a poco ha ido recuperándose.
“Él es un milagro viviente, a como nosotros lo habíamos visto y el diagnóstico que habían dado los doctores, a nosotros nos dijeron: ‘prepárense y alístense porque él se va, hagan todos los preparativos’. Nosotros hasta colocamos el nicho, teníamos todo listo para el funeral, las honras fúnebres, todo lo teníamos listo, porque él a parte del derrame le había entrado una bacteria en sangre y el preinfarto, el derrame, todo se le juntó, bueno los doctores no daban ni un cinco por él y gracias a Dios bueno, Dios es el que tiene la última palabra y ha ido evolucionando bien”, mencionó Giovanni.
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Bastante difícil verlo así
El productor musical contó que los neurólogos les explicaron a él y a su papá, Felipe Contreras, que parte del daño cerebral que le quedó a su hermano por el derrame es esa falta de movilidad en la mitad de su cuerpo y que ven casi que imposible que vuelva a ser como antes.
De hecho, les dijeron que ven muy dificil que vuelva a agarrar un bajo y toque como antes o que se acuerde de todo el repertorio musical que tenía en su mente.
“Es bastante triste verlo así después del gran músico que él era y toda la trayectoria que tenía, con todo su conocimiento musical, pero verlo así, que a veces no puede ni agarrar la cuchara, es bastante difícil, confiando en Dios, Dios tiene un propósito para todas las cosas, pero ahí va, ahí va, y nosotros confiamos en que algún día él se llegue a levantar de ahí.
“Es bastante difícil porque los doctores dicen que es un proceso largo, la rehabilitación es un proceso bastante largo, hay que tener mucha paciencia y pedirle mucho a Dios y él tiene que poner mucho de su parte para poder rehabilitar esa pierna y ese brazo”, señaló.
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Cuidados constantes
Giovanni señaló que al bajista lo tuvieron que internar en el albergue porque tanto él como su papá no podían estar tan pendientes de sus cuidados y porque necesita rehabilitación constante.
Él es un milagro de Dios, está bien, está en un proceso lento de rehabilitación“.
— Giovanni Contreras, productor musical
Además, necesita de alguien que lo bañe, lo atienda y esté muy comprometida con hacerle la dieta que le corresponde y darle sus medicamentos.
“Él anda en silla de ruedas, lo tienen que bañar, lo tienen que ayudar con la comida, con las cosas, entonces con la rehabilitación le ponen como una electricidad, como unos chuponcillos donde le ponen algo y le dan electricidad como para despertar los nervios, algo así es, y como para que los músculos no se atrofien, hay que estarle moviendo el brazo y la pierna, pero ahí va.
“Él tiene un régimen muy estricto de pastillas por cuestión del corazón y la presión arterial, lo tienen controlado y eso tiene que ser enfermeras y terapeutas que lo estén tratando, por eso es que está en el albergue. Gracias a Dios mi papá le logró conseguir ese cuido especializado para él porque nosotros no podríamos”, mencionó.
Felipe tiene tres hijos que también pasan muy pendientes de su recuperación y, aunque las visitas en el albergue son muy restringuidas, algunos amigos músicos han ido a verlo.
“De parte de mi papá Felipe Contreras y Giovanni Contreras siempre vamos a agradecer a los que preguntan y tienen en oración a mi hermano y que gracias a esas oraciones y a esa preocupación de todo el mundo por él y esas buenas energías que le mandaron él está donde está ahorita, gracias a Dios y a todas las oraciones de las personas”, concluyó.