“Tengo un hijo de 28 años y es el único que queda en la casa, soy sola por lo que le pedí que empiece a aportar porque hace más de tres años terminó de estudiar y tiene un buen trabajo, pero me preguntó por qué le estoy cobrando, si antes le pagaba todo y yo salía adelante. Mis otros tres hijos dicen que soy una alcahueta, él es muy finito y tengo que comprarle ciertas cositas porque no come cualquier cosa. Me toca comprarle todo, preparar sus comidas y si no lo hago se molesta. Él me dice que si esto me molesta se va a ir de la casa y me da miedo la soledad”.
1. Más allá del tema del aporte económico que debe hacer su hijo, hay un momento en la vida que es parte de los cambios de una familia, cuando los hijos son adultos y conviven con los padres, que estos reconozcan que están llamados a hacer un aporte económico al hogar desde una perspectiva solidaria.
2. Si bien es cierto que es importante resolver, enfrentar y asumir el tema de su hijo, este tema de la soledad también es importante que lo resuelva.
3. Creo que debe preguntarse ¿cuál es su proyecto de vida?, ¿qué hace usted?, ¿qué gustos o actividades podrían llamarle la atención?, ¿cuál es su proyecto de vida? Este debería ser su foco de atención, es importante dentro de su desarrollo personal.
4. En algún momento es posible que tenga que enfrentar el hecho de que sus hijos tomen un camino independiente y que desde ahí tenga que evaluar qué va a hacer con su vida.
5. La compañía de un hijo es importante, pero tarde o temprano es muy posible que asuma un proyecto de independencia y haga su vida. Esto le va a poner frente a la soledad, por esto es que debería de cuestionar a fondo ¿cuál es su visión de vida?, ¿cuál es su proyecto?
6. No es pensar solo en una eventual pareja, porque hay personas que no tienen pareja y tienen una vida muy rica en términos de su vinculación emocional con otras personas, desarrollan gustos e intereses, tienen actividades que nutren su día día de diferentes experiencias. En la medida que establezca un proceso de desarrollo personal le puede resultar muchísimo más sencillo el establecimiento de límites a su hijo.