“Me he sentido muy triste porque imaginaba mi embarazo muy diferente”

“Vamos a tener nuestro primer bebé, faltan dos meses, pero me he sentido muy triste porque imaginaba mi embarazo muy diferente. Mi esposo y yo estamos muy felices por el bebé, pero no hemos visto nadie, no vamos a hacer té de canastilla, tampoco hemos tenido la oportunidad, por los cierres y los horarios de trabajo de mi esposo de comprar cositas o prepararnos de forma diferente. Mis amigas me han propuesto hacer un té virtual, pero eso no me gusta. Todo esto me pone muy triste”.

1. Es completamente comprensible lo que usted vive. Esperar la llegada de un bebé, siempre es un proceso que llena de ilusión y emociones, que no solo son vividas en la pareja, sino también en el entorno social y familiar, pero la pandemia lo cambió todo.

2. Por su condición de embarazo, es prudente tomar distancia de aquellos ambientes que puedan contribuir a un contagio. Tomar distancia es parte de lo que implica amar pues es cuidarse y hacer las cosas desde el amor. En este momento implica asumir el distanciamiento social como una expresión de amor. A pesar de que los planes eran otros, esto no significa que no se puedan hacer, solo deben cambiar el esquema y la visión de vida que se tenía.

3. Todos los planes previos habrá que retomarlos cuando el bebé haya llegado. La pandemia permite una modificación de los estilos de vida y en lugar de hacer un té previo al embarazo, se podría hacer un té de bienvenida, en el momento que resulte seguro para todos, lo que se requiere es tener apertura, creatividad y flexibilidad.

4. Quizá un té virtual no sea lo que usted deseaba, pero puede ser un acercamiento a la bienvenida y la conexión emocional que buscaba. Piense, analice y no renuncie a lo que quería hacer, solo debe cambiar los planes, el momento, el lugar y la fecha. Es importante aprovechar las oportunidades que le da este momento, pues al abrir su corazón es más simple vivir momentos como los de hoy con un peso emocional menos complejo.