“Me prometió que se iba a separar y llevo años esperándolo”

Consejos útiles para una mejor calidad de vida

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Que vida más complicada la mía. Empecé una relación con un hombre casado, que me juraba que estaba separado, pero que vivía bajo el mismo techo de su ex, en un cuarto aparte y que no podía irse. Pero en ese proceso ha pasado ya algunos años, incluso ha tenido dos hijos con ella. Él lo que me dice es que se los debía a ella, pero al final no toma ninguna decisión. Cada vez nos vemos menos, cuando yo trato de alejarme y empiezo conocer a otra persona, él aparece, pero al final no pasa nada.

1. Creo que uno tiene que mirar la realidad para poder tomar una decisión, usted procura un proyecto de relación estable, posiblemente de convivencia y un plan de vida de pareja. No obstante, está con una persona cuyas condiciones actuales le impiden estar con usted de la forma en la que desea, por tanto, hay que ser realista, usted está enamorada de una posibilidad, pero la realidad es otra.

2. El otro elemento, que es central, es que en la vida llega una etapa en la que uno tiene que cuestionarse qué es lo que se quiere y dejar de mirar a la otra persona que no me ofrece lo que yo quiero. ¿Por qué acepta algo así? Este es un tema de desarrollo personal, puede tener muchas aristas psicológicas, que le toca a usted resolverlas.

3. Nuestra vida emocional no se resuelve cuando todas las personas a nuestro alrededor cambian aquellos aspectos que se necesitan para poder estar bien. La vida emocional cambia cuando yo me permito asumir mi responsabilidad existencial, tomar decisiones para poder resolver lo que no me hace bien y asumir nuevas decisiones para estabilizar mi vida.

4. Yo la invito a que se pregunte qué pasa con usted y que haga una revisión a profundidad que la muevan replantear su historia. Si no tiene idea de cómo hacerlo, aunque la realidad habla muy claro y le dice la ruta, entonces de verdad busque ayuda, porque no podemos aspirar a vivir cosas que no se sostienen en los hechos, porque de lo contrario solo vamos a acuñar frustración.