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La modelo Brittney Lewis acusó al mago David Copperfield de violarla y drogarla a finales del año 1988, cuando ella era menor de edad, tenía 17 años.
Lewis explicó a la revista ‘Wrap’, en declaraciones recogidas por Europa Press, que conoció a Copperfield poco después de llegar a Atami, Japón, sede del concurso de modelos ‘Look of the Year’ organizado por Elite Model Management.
El mago fue uno de los jueces del concurso y, al concluir el evento, se puso en contacto con la modelo para invitarla a uno de sus próximos espectáculos en California. Al ser menor de edad, Copperfield le pidió permiso a su abuela, Patricia Burton, quien le creyó cuando este aseguró que la cuidaría y estaría acompañada en todo momento.
Lewis viajó a California y después del espectáculo estuvo con Copperfield en un bar, en un momento notó como el mago le echaba algo en su vaso
"Pregunté: ’¿Qué estás haciendo?', él dijo: ‘Oh, solo estoy compartiendo’", señaló Lewis.
A partir de ahí confiesa tener un recuerdo confuso, solamente guarda en la memoria fragmentos de la noche, como la vuelta al hotel en taxi y él en la habitación vistiendo una túnica negra.
"Me estaba besando en la cara y luego recuerdo que comenzó a hundirse en mi cuerpo con su cara. Tan pronto como comenzó a bajar, me desmayé por completo", explicó.
A la mañana siguiente, se despertó con náuseas y vio entrar a Copperfield por la puerta, quien le aseguró que no había ocurrido nada. "‘No entré en ti’", son las últimas palabras que escuchó del mago, antes de irse de la habitación.
El mago respondió diciendo que apoya al movimiento #metoo, el cual denuncia el acoso sexual y que no tiene miedo que lo investiguen.
″Así que mientras enfrento otra tormenta, quiero que el movimiento (#MeToo) siga floreciendo″, añade Copperfield en su cuenta de Instagram.
