Esta historia de amor, revelada recientemente por una de sus protagonistas, podría ser perfectamente el guion de una película de Woody Allen o de Richard Curtis.
Resulta que Desiree White, una estadounidense de 32 años, contó que se divorció de su esposo para casarse con su padrino de bodas, que además era su mejor amigo.
Cuesta creer lo que sucedió entre Desiree, Bryant y el exesposo de White, de quien no se conoce el nombre.
Lo curioso de esta historia, que fue dada a conocer en diferentes medios y en TikTok, es que Bryant -ahora esposo de White-, le confesó su amor a Desiree en la boda de ella con su ex celebrada en 2010.
El discurso de Bryant en la fiesta fue así: “Recuerdo el primer momento en que vi a Desiree, la amé. Me enamoré de ella. Sabía que ella tenía que ser mía. Pensé que era la persona más hermosa que había visto en mi vida”. Vale aclarar que el joven aparentemente estaba pasadito de tragos.
“Él dijo, ‘Ella es la mejor persona que he conocido. Luego descubrí que ya tenía novio y pensé que necesitaba encontrar una manera de conseguirla, pero luego lo conocí (al exmarido de White) y nos hicimos amigos’”, detalló Desiree en diálogo con Kennedy News and Media.
Todos se quedaron boquiabiertos al escuchar lo que había dicho el muchacho, pero se hizo como si nada y la fiesta continuó.
En la misma celebración, Bryant bailó con Desiree y le preguntó por qué nunca le había dado una oportunidad. Ella quiso saber qué intentó decirle y él, abrumado por el asunto, le respondió: “Nada, te amo y amo a tu esposo”.
Desiree y Bryant se conocieron en el colegio secundario. A él le gustaba White, pero ella no le hablaba porque estaba de novio con quien ahora es su ex. Además los tres habían entablado una relación muy amistosa, tal es así que los dos hombres solían comer juntos y ella, a veces, le conseguía citas amorosas a Bryant.
“El día de la boda entré a la sala de estar, justo cuando terminé de arreglarme con el vestido de novia puesto y el cabello arreglado. Bryant entró en la casa de mis padres y se congeló y me miró fijamente. Le pregunté: ‘¿Qué pasa?’ Dijo que me veía hermosa. Nunca había tenido un momento de él mirándome así”.
Cuando terminó el festejo de bodas, Desiree pensó que lo mejor sería interpretar las palabras de amor de Bryant como equivocadas. Se convenció de que su amigo lo había hecho porque estaba “ebrio y solo”.
Sin embargo, un año después del casamiento, la relación entre White y su exmarido empezó a flaquear. Él, según Desiree, había adoptado “un estilo de vida diferente”.
Cuando Desiree y su ex finalmente se distanciaron, Bryant intentó ayudar a su amiga para que pudiera sobrellevar el mal momento. “Me pedía que comiera con él o pasara el rato y viéramos la televisión. Él estaba tratando de estar allí para mí”, dijo ella.
Entonces, en uno de esos encuentros se besaron.
“Bryant y yo nos besamos un día cuando estábamos saliendo. Fue de la nada. Cuando me besó, no lo detuve, luego le devolví el beso. Me sorprendió que fuera un buen beso. Se sentía bien y natural”, relató Desiree.
Su amor era tal que no decidieron esperar para nada: al año siguiente, en 2012, se casaron y tuvieron a su primera hija, Sawyer, quien ahora tiene nueve años.
Hoy, Desiree y Bryant son padres de cuatro niños y viven en una constante luna de miel.