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Un voluntario de una ONG (organización no gubernamental) de Vícar, una localidad de Almería en España, fue detenido por extorsionar sexualmente al menos a seis mujeres de escasos recursos económicos.
El detenido tenía a su disposición alimentos para donar a los más necesitados, pero los usaba para cometer los delitos.
Sus víctimas respondían a un mismo patrón: mujeres solteras, con hijos y con un elevado riesgo de exclusión social.
El hombre les ofrecía los alimentos a cambio de que mantuvieran relaciones sexuales con él. Cuando no podía conseguir sexo a cambio de la comida les cobraba a los necesitados una “mordida” para ponerles en la lista de espera de acceso a esa ayuda.
La investigación se inició a raíz de la denuncia interpuesta en enero por una de las víctimas, quien relató su “extrañeza” ante el hecho de que no recibía “siempre la misma cantidad de alimentos” y de que esta fuera diferente a la que recibían algunas de sus vecinas en su misma situación, que variaba mucho.
La mujer contó a los agentes de la Guardia Civil que, dada su situación de extrema vulnerabilidad y sus problemas personales, había tenido que acceder a tener sexo con el detenido. En esas ocasiones confirmó que recibía más comida.
La Guardia Civil también investiga a su esposa, quien se encargaba en algunas cosas del reparto de los lotes, además al responsable de la ONG por presunto delito de apropiación indebida. En este último caso se le achaca errores de funciones ya que no habría ejercido un control exhaustivo de la actividad de la ONG y habría permitido el almacenamiento de la comida en lugares no autorizados.
