“No puedo seguir el ritmo de ella porque tenemos trabajos muy diferentes”

“Mi novia me está pidiendo tiempo. Nosotros tratamos de vernos con mucha frecuencia y hablamos también muchísimo, no obstante, hay días en los que no puedo seguir el ritmo de ella porque tenemos trabajos muy diferentes. Ella dispone de muchísimo más tiempo, pero yo tengo que estar atendiendo mucha gente y se me hace muy difícil. Ella dice que cuando uno quiere lo hace, que todo lo demás son excusas. Yo puedo mejorar, pero también quiero comprensión, lo que pasa es que siento que pone todo como que si fuera culpa mía”.

1. El tiempo, la comunicación y los espacios de pareja, en sus diferentes etapas, siempre tienen que estar sujetos a revisión, por parte de ambos, porque estos tienen que adaptarse a las circunstancias cambiantes que se vive, no sólo como pareja sino cada uno en su entorno social o laboral.

2. De ahí que el primer paso sea poder tener una comunicación abierta, propositiva, pero no desde la culpa, porque esto al final crea sentimientos encontrados, provocan múltiples tensiones. Esto debe ser planteado en un clima orientado a crecer, analizar y proponer.

3. Tampoco tenemos que tomar lo que diga nuestra pareja como un señalamiento, una crítica severa. Claro está, aquí ayuda que ambos procuren hablar de forma tal que se pueda crear una escena cálida en la comunicación sin que se perciba algún grado de maltrato. Es importante cuidar la forma y el estilo de la comunicación cuando se van hablar de estas cosas. Se hace profundamente importante tampoco sentirnos atacados, personalizar las cosas o darle cabida a la frustración porque al final esto va a crear tensión.

4. El reto siempre es poder hablar de estas cosas sin reparo, abierta y claramente, sin miedo, sin complicaciones y con libertad. Toda pareja debe hacer procesos de revisión constantes, pero ambos tienen que desarrollar comprensión, tolerancia, empatía, hacer el esfuerzo por valorar lo positivo que tiene cada uno, y reconocer nuestras aspiraciones para generar continuas negociaciones, que nos permitan tener una vida cálida, serena, donde las diferencias se convierten en la plataforma motivacional, sobre las cuales vamos a construir una relación sana.