La cinta Una mujer fantástica se convirtió en una de las sorpresas de la edición 90 de los Premios Oscar al ganar la estatuilla en la categoría de Mejor película extranjera.
La película, de origen chileno, es protagonizada por Daniela Vega, actriz trans, quien interpretó magistralmente a Marina, una joven en duelo y víctima de los prejuicios de la conservadora sociedad chilena.
Daniela encarna a una mujer como las otras: femenina, frágil, fuerte y digna.
“Marina y yo compartimos que somos ‘trans’, que nos gusta cantar la ópera y los hombres guapos, nada más”, dijo Vega en una reciente entrevista. “Ella es mucho más elegante que yo, tiene más paciencia, es una mujer mucho más pacífica, yo soy más explosiva, más latina”, afirmó en una entrevista.