Periodista Alejandro Ramírez, de Multimedios, nos dice dónde consigue sus llamativos trajes

El presentador Alejandro Ramírez, de Telediario Internacional de Multimedios, se acuesta con las gallinas y se levanta mucho antes de que cante el gallo.

Y no es paja, ya a las 6 p.m. normalmente está acostado y su despertador suena todos los días a las 3 de la mañana. Por eso se considera un hombre muy tranquilo, que le gusta pasar tiempo en su casa y es cero fiestero.

Si se pregunta por qué madruga tanto si su programa empieza a las 10 a.m., es porque le gusta levantarse a revisar las noticias que han trascendido en el mundo para preparar así su noticiero. Además, prefiere hacer ejercicios y desayunar con calma antes de llegar al canal a las 9 a.m.

Alejandro no solo es un apasionado de la comunicación, también le encanta viajar. De hecho, desde hace 28 años tiene su propia empresa de asesoramiento de viajes, con la que ayuda a sus clientes a buscar los mejores vuelos y hoteles.

Conozca más curiosidades de este vecino de Santa Ana, de 46 años, quien se ha ganado el cariño y la admiración de los televidentes por su forma de presentar las noticias y por los trajes tan coloridos que usa diariamente.

- ¿Qué hacía antes de darse a conocer en la tele?

Mi primer trabajo fue a los 18 años como mensajero de Viajes Colón y luego empecé a hacer boletos de viajes cuando se hacían a mano, luego fui aprendiendo a vender viajes y a eso me dedico desde hace 28 años.

- ¿Qué tipo de clientes atiende en su agencia?

Tengo clientes que tienen tiendas y viajan a Los Ángeles a traer ropa. También atiendo a empresas grandes y productoras de eventos. Por ejemplo, he hecho los boletos de los pilotos de los X-knights desde la primera edición. Mis cliente son muy variados. Digamos que de eso vivo porque el periodismo no da para vivir (risas).

- ¿Y qué lo llevó a la comunicación?

Desde pequeñito yo quería hacer tres cosas: trabajar en un aeropuerto, trabajar en un banco y presentar noticias. Ojo, no quería ser periodista, solo presentar noticias. Cuando entré a trabajar me pagué los estudios en turismo por el asunto de los aviones, ahí me enamoré de los viajes. Luego dije que me tocaba sacar periodismo porque yo quería presentar noticias y ya lo del banco lo olvidé.

- Ahora combina esas dos pasiones...

Mi trabajo como agente de viajes y las oportunidades que he tenido para viajar, me han dado más bagaje. Cuando me siento a dar una noticia de China o de un lugar cercano como México, saber con certeza el lugar del que estás hablando, creo que ayuda a transmitirle a la gente una sensación de familiaridad que espero que en la casa lo reciban bien.

Entre los comentarios que recibo es que les gusta el noticiero por como explico las noticias, pero yo solo las doy y trato que la gente sienta que de verdad está haciendo una viaje noticioso, por eso siempre empiezo diciendo: ‘Acompáñenme a realizar un viaje por el mundo a través de las noticias’.

- ¿Le gustaría cubrir otro tipo de noticias?

Vieras que es muy curioso porque primero decía que quería presentar noticias y en algún momento añoraba hacerlo en una revista matutina, tuve la oportunidad de presentar La Revista con Paula Brenes en varias oportunidades, lo disfruté mucho, pero creo que me siento como pato en mi charco dando las noticias internacionales.

Antes también presenté un rato las noticias de la mañana, pero es muy complicado saberse todas las noticias que pasan en el país y lo que ocurre en el mundo, es que yo soy de los que pienso que para verse seguro en la televisión hay que saber de lo que se está hablando y se nota cuando alguien solo llega a que lo maquillen y a leer sin tener la menor idea de lo que está diciendo.

- ¿Se la pasa viajando mucho?

Mi trabajo es el que me permite viajar, aunque me amarran mucho mis dos perros, Robi y Gio, incluso llegué a tener cinco, pero se han ido muriendo de viejitos. Cuando me voy, la muchacha que me ayuda aquí en la casa es la que me los cuida.

- ¿De dónde saca tantos trajes tan diferentes?

En esas oportunidades de los viajes es cuando aprovecho, muchas veces no es porque quiera algo diferente sino porque se consigue mucho más barato. Uno de mis lugares favoritos en el mundo es Estambul (Turquía) y si uno aprovecha una oferta de viaje es un lugar sumamente barato para comprar ropa, los trajes cuestan como la cuarta parte de lo que vale uno aquí.

-Imagino que tiene un clóset inmenso. . .

Tengo un clóset amplio y uno solo para los trajes porque quitan mucho campo, soy un obsesionado con el orden y la limpieza, entonces todo tiene que estar doblado y ordenadito.