“Quinceañera” hizo calendario con reconocidas transformistas

Naya Lords, una de las transformistas más reconocidas del país, está cumpliendo 15 años de brillar en los escenarios y como feliz quinceañera desea festejar en grande.

Lords tiene 37 años y contó que con motivo de la celebración quería hacer algo significativo, no solamente para ella, si no también para sus colegas, quienes conocen muy bien los esfuerzos y el corre corre que conlleva trabajar como transformista.

“Como son 15 años quería hacer una fiesta como toda una quinceañera, con vestido, chambelanes y toda la cosa, pero al final no tuve tiempo para poder organizarlo, entonces fue cuando se me ocurrió hacer un calendario junto a otras transformistas”, detalló.

Luego de varias semanas de producción y mucho trabajo y creatividad, Naya organizó para este viernes 1 de febrero el lanzamiento oficial del almanaque en club El Teatro, que contará con un espectáculo en vivo y con la presencia de los transformistas que aparecen en las fotos del calendario.

Lords detalló que quienes lo acompañan en la producción fotográfica son compañeros que durante estos años le han brindado ayuda para salir adelante con el negocio.

“Tuve que hacer una selección muy difícil porque hay muchas otras que han significado mucho para mi vida y que no están por diferentes motivos, pero aun así, tengo como invitadas a 16 de las mejores transformistas del país”, detalló.

Drag Nicole, Nina Arik, Venus Queen, Monse Sánchez, Barbie Lords, Thiara Lords, Miranda Lords y Carlos Lords son algunos de los invitados en las páginas del calendario que por primera vez reúne a los transformistas más reconocidos de Tiquicia.

Cada mes del almanaque es de un tema diferente que tiene que ver con algunas de las festividades que se celebran.

De los favoritos de Naya está enero que representa la obra El nacimiento de Venus, del pintor Leonardo Da Vinci. Noviembre está inspirada en Frozen, la película de Disney, en setiembre se disfrazó de la Reina de corazones y diciembre, como corresponde, retrataron el ambiente festivo navideño.

Camino recorrido

Aunque ahora todo es alegría y color de rosa, el vecino de barrio Córdoba recordó que los inicios fueron rudos por todos los tabués que hay con respecto a trabajar como transformistas.

Lords recordó que desde joven descubrió que una de sus mayores pasiones era el baile, lo que lo impulsó a ser gimnasta y ya más grande se dedicó a ser bailarín.

Fue justamente su amor por el baile que terminó en una audición en un local de la comunidad gay.

“Un amigo me dijo que una disco necesitaba un bailarín, solo que tenía que vestirse de mujer y yo lo dudé un poco, pero después dije: ‘bueno voy a ir a ver’. Fui, hice la audición en tacones y así es como 15 años después sigo en el arte del transformismo”, detalló.

El trabajito le trajo estabilidad económica, pero también un montón de problemas.

“Con mi familia no me fue nada bien porque las personas equivocadamente ligan el transformismo con prostitución, con que uno va a estar en una esquina, pero con el pasar del tiempo mi mamá entendió que es solo un trabajo, que es una expresión de arte”, indicó.

Otro de los peros en ese trabajo, es que por más que les apasione, no se puede vivir de eso.

“Invertimos más de lo que ganamos. Sí, es demasiado dinero, en una sola producción entre zapatos, forros, pelucas, vestuario uno puede gastar hasta más de 500 mil colones”, explicó.

Es por esa razón, que la mayoría de los transformistas deben combinar su vida en el escenario con otros negocios para salir adelante económicamente.

“En estos años lo más difícil es no tener un lugar fijo para trabajar, no tener, como decimos nosotros, una casa. Yo ahora estoy trabajando en el club El Teatro, pero no es que estoy exclusivo ahí”, explicó.

Naya asegura que ahora las cosas han ido cambiando y que cada vez es más fácil que las personas entiendan que es una cosa artística.