Hoy hablaremos sobre el silencio en la vida de pareja.
1. Los silencios deben tratarse con cuidado y es uno de los temas más importantes de tratar, ya que es fundamental hacer un análisis del silencio en la vida de una pareja. Hay silencios que son reflexivos, que permiten una visión de regulación emocional para analizar cada posición y tener una estructura de introspección que les permita una comunicación más sana, efectiva y menos reactiva.
2. Pero hay silencios que son muy hirientes y que poco suman en la vida de una pareja. Cuando alguno de los dos tiene algo que decir y la otra persona no se conecta con una visión de escucha y cooperación, esto siempre puede causar procesos de dolor que son complejos, hirientes y difíciles. Los silencios que tienden a perpetuar el dolor, no son sanos, pues no permiten que haya una visión agradable y los pone en una frecuencia de conflicto que en nada ayuda. Esos silencios en los que se habla y no pasa nada, solo acumulan tensión y causan dolor.
3. El silencio evasivo re indiferente, no solo causa dolor sino que crea una estructura de antipatía que nada contribuye al bienestar emocional de la relación, pues los mantiene a la defensiva. Con la ofensiva se van desconectando en la expresión del afecto, crea distancias físicas, se trae abajo la pasión y los desconecta, pues en el silencio se pierde la motivación para estar juntos. Revisen si sus posiciones contribuyen a que tengan un silencio reflexivo o uno que solo causa dolor.
4. Todos están llamados a una visión de escucha y compromiso que puede crear una posibilidad real para su crecimiento emocional y esto depende de ustedes. Si su silencio causa dolor y no suma soluciones, el camino se torna complejo. Este silencio alimenta emociones encontradas, desestimula una visión de encuentro y frustra. Tienen que revisar qué pasa y caer en la cuenta de que vivir así solo causa dolores agudos.