(Fotos) COVID-19 no pudo con la fe del mundo este Domingo de Ramos

A pesar de que las iglesias de casi todo el planeta están cerradas, los fieles celebraron la entrada victoriosa de Cristo

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El papa Francisco ofició la misa de Domingo de Ramos, que marca la entrada de la Semana Santa, en una basílica de San Pedro desierta debido a la pandemia de coronavirus.

El 15 de marzo, el Vaticano anunció que todas las celebraciones litúrgicas de Pascua se llevarían a cabo "sin la presencia física de los fieles" en la plaza de San Pedro.

Así, este domingo, el papa bendijo los Ramos en una basílica vacía, salvo por un puñado de religiosos y religiosas, sentados cada uno en un banco.

La misa fue difundida en directo en la página web del Vaticano, como también lo será el próximo domingo para la misa de Pascua, la celebración más importante del cristianismo.

"Hoy, en el drama de la pandemia, ante tantas certezas que se desmoronan, frente a tantas expectativas traicionadas, con el sentimiento de abandono que nos oprime el corazón, Jesús nos dice a cada uno: 'Ánimo, abre el corazón a mi amor. Sentirás el consuelo de Dios, que te sostiene', dijo el papa argentino en su homilía.

Dirigiéndose a los jóvenes, Francisco mencionó el esfuerzo de todos aquellos que pese al riesgo de contagio salen a la calle para ayudar a los otros.

“Mirad a los verdaderos héroes que salen a la luz en estos días. No son los que tienen fama, dinero y éxito, sino son los que se dan a sí mismos para servir a los demás. Sentíos llamados a jugaros la vida. No tengáis miedo de gastarla por Dios y por los demás: ¡La ganaréis!”, añadió.

Jerusalén

Un pequeño grupo de monjes franciscanos y fieles católicos salieron a las calles del barrio cristiano de Jerusalén el domingo para distribuir ramos de olivo, luego de que la tradicional procesión del Domingo de Ramos fue cancelada por las restricciones impuestas para contener la propagación del nuevo coronavirus.

En otra parte del Medio Oriente, Irán, que lidia con el peor brote en la región, anunció planes para permitir que algunos negocios vuelvan a abrir dentro de unas semanas, incluso cuando la cifra de muertes sigue aumentando.

El Líbano reabrió su aeropuerto para permitir que los ciudadanos varados en el extranjero regresen a casa, mientras que las iglesias que permanecieron abiertas para el Domingo de Ramos incluso durante la guerra civil de la nación de 1975 a 1990 estaban mayormente vacías.

Un funcionario de alto rango de Pakistán también pidió a las Naciones Unidas y a otras naciones ricas que enviaran alimentos y ayuda médica de emergencia a cientos de miles de refugiados afganos encerrados en campamentos ubicados en la región fronteriza.

En Israel, más de 8.000 personas se han contagiado con el nuevo coronavirus y 46 han fallecido. En Cisjordania, se han reportado casi 200 casos, incluido un brote grande en la ciudad bíblica de Belén.

En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus causa síntomas leves o moderados, como fiebre y tos que desaparecen de dos a tres semanas. Pero en algunos, sobre todo en adultos mayores y personas con enfermedades preexistentes, puede causar afecciones más graves como neumonía o la muerte. Sin embargo, es altamente contagioso y puede ser propagado por personas que no muestran síntomas.

Irán es la nación más afectada de la región. La televisora estatal iraní reportó que 151 personas más han muerto, elevando la cifra total de decesos a 3.603 con más de 58.000 casos confirmados.