En la isla mediterránea de Córcega, que pertenece a Francia, están sorprendidos por un animal del que se habla desde hace muchísimo tiempo.
Quienes lo han visto se preguntan si es un gato parecido a un zorro o un zorro con rasgos de gato y algunos lo llaman ya con normalidad “gato zorro”. Otros se cuestionan si se trata de una especie nueva, pero lo que se sabe con seguridad es que ha estado bajo investigación por más de diez años.
En Córcega se hablaba de este animal desde hacía mucho tiempo porque ha estado presente en las leyendas populares. Los corsos lo apodan “ghjattu volpe”.
Quienes les han seguido la pista han informado haber visto más de una docena en estado silvestre en las zonas montañosas de la isla. A simple vista tiene toda la pinta de un gato, pero ya en detalle se descubre que tiene rasgos muy parecidos a los de un zorro.
Miden unos 90 centímetros desde las orejas hasta la cola, tienen el pelaje más denso que un gato, orejas muy anchas, bigotes cortos y los dientes caninos muy desarrollados.
Los expertos interesados en descifrar el misterio de su origen colocaron trampas y lograron atrapar algunos ejemplares para hacerles exámenes.
Las imágenes causaron furor en el mundo, pero los científicos se adelantaron a aclarar que en este momento es imposible decir si se trata o no de una especie o una subespecie nuevas.
De lo que sí están seguros es que no se trata de un gato doméstico, aunque sí creen que es primo hermano (o tatarabuelo) del gato doméstico europeo.
Hace falta tener los resultados de los exámenes para dar una respuesta definitiva. Se sospecha que los primeros ejemplares llegaron a la zona hace unos 6.500 años.