Dos agentes de la Oficina de Investigaciones de Georgia en Estados Unidos (GBI por sus siglas en inglés) quisieron jugar de graciosos y metieron la pata hasta el fondo al hacerse una fotografía con la cabeza decapitada de un hombre durante un examen médico, informó el organismo el jueves. Por esa razón, ambos fueron despedidos.
La vocera del GBI, Nelly Miles, dijo que Jesse Landen Wilson y James N. Brown hubieran sido despedidos de no haber renunciado. Brown tomó una foto de Wilson posando con los restos de Robert Page, quien según las autoridades fue desmembrado por un vecino.
En noviembre se denunció la desaparición de Page. Las autoridades siguieron un rastro de sangre que conducía al patio de Christian Ponce Martínez y descubrieron los restos de Page ocultos bajo una lona y en un refrigerador.
Ponce Martínez fue arrestado bajo cargos de homicidio y otros delitos. Según la policía, los dos hombres aparentemente tuvieron una discusión en la casa de Page antes del asesinato.