Un mono cariblanco se armó con un cuchillo de cocina y atemorizó a habitantes de Corrente, en el departamento de Piauí, en Brasil.

El animal se metió en un sitio vacío de un centro comercial de la ciudad y desde ahí salía hacia las viviendas cercanas y se robaba comida.

En un video quedó registrado un instante en el que el mono, al que bautizaron Chico, parecía estar afilando en un muro el cuchillo que cargaba.

Medios de comunicación locales compartieron el curioso momento en que el primate golpea con el cuchillo techos de casas cercanas. Durante al menos una semana, el mono hizo estragos. Algunas personas optaron por encerrarse en sus hogares para evitar toparse con Chico; otras tomaron la situación con gracia.

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Amigo de lo ajeno

Varios miembros de la comunidad alertaron a las autoridades medioambientales, pero ya antes el cariblanco se había llevado ropa, galletas y cajas completas de jabón en polvo hacia el lugar donde dormía, dentro del centro comercial.

Gracias a las denuncias de los vecinos, el Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (Icmbio), se dirigió a la zona y capturó al mono, que desde entonces se encuentra junto a otros diez primates de su especie.

En el el Instituto Chico Mendes buscan rehabilitarlo para que no mantenga conductas violentas que adquirió mientras vivía en ambientes desconocidos. Lo llevaron al Bioparque Zoobotánico, un refugio de animales, para ver cómo andaba de salud.

La bióloga Vanessa Gomes, del Bioparque Zoobotánico, explicó al diario brasileño O Globo que los monos cariblancos son muy sociables.

“Estamos observando su alimentación y relación con otros de su especie para que logre recobrar sus instintos de vivir en manada”, dijo Gomes.