La elección del presidente número 46 de los Estados Unidos se topó al tico, Carlos Castro, con su primera oportunidad de votar en Gringolandia, algo que lo tiene muy contento porque espera un cambio en la silla presidencial.
Como su ciudadanía gringa se la dieron hace poco, este breteador disfrutó la mañana del 3 de noviembre de su primer voto. “Voté por Biden (Joe), por un no al racismo y la igualdad de las minorías”, fue lo primero que nos dijo al salir del recinto electoral.
“Con Trump (Donald) no tengo ninguna queja en lo económico, de hecho, creo que de los 20 años que tengo en Estado Unidos, los últimos cuatro es cuando más trabajo he tenido, sin embargo, también han sido cuatro años de mucha división racial, la he sufrido en carne propia y estoy convencido que eso tiene que ver con Trump”, explica don Carlos.
Llegó en el 2001 a Norteamérica a ponerle bonito en la breteada. Carlos trabajó por varios años como comunicador en radio Columbia, le tocó estar a la par de don Javier Rojas González y Parmenio Medina (ambos fallecidos), además de cubrir por años el fútbol de primera división, así como varias competencias internacionales de clubes como Saprissa, Alajuelense y la Selección Nacional.
“He vivido momentos muy lindos, también difíciles, no puedo negar que hubo momentos en que pasé hambres, sin embargo, creo que en los últimos años ya estoy recogiendo el fruto de tanto trabajo. Estoy convencido que un cambio de presidente es lo mejor”, aseguró don Carlos quien ya tiene su propia empresita de remodelaciones de techos y paredes.
¿Trump o Biden?
¿Reelegir al republicano Donald Trump o reemplazarlo por el demócrata Joe Biden? Estados Unidos acude este martes a las urnas en una elección presidencial histórica, marcada por la pandemia del coronavirus, la crisis económica y una profunda división.
Un número sin precedentes de votos anticipados ya fueron emitidos -más de 100 millones, la mayoría por correo - mientras los estadounidenses acudían a los centros de votación, que permanecerán abiertos dependiendo del estado hasta cuatro de la tarde del miércoles 4 de noviembre.
Trump auguró una “muy sólida posibilidad de ganar”, durante una entrevista telefónica con Fox News en la que consideró “terrible” y “peligroso” que millones de votos por correo tarden en ser contabilizados, pero minimizó afirmaciones de que planeaba declararse vencedor antes de que se complete el escrutinio.
“Creo que vamos a tener una victoria, pero solo cuando haya una victoria”, afirmó. “No hay motivos para juegos”.
Mientras Trump le tira duro a su rival y advertía sobre el riesgo de que el país se vuelva “socialista”, Biden asistía a misa en Wilmington, Delaware, donde reside. En esa iglesia a la que va todos los domingos están las tumbas de su hijo Beau, y de su primera esposa y pequeña hija, muertos trágicamente. “Hoy, voten por un nuevo día en Estados Unidos”, tuiteó el exsenador de Delaware.