Mario Castillo Méndez, diputado del PAC, tuvo que afrontar el dolor de sepultar a su esposa, a su mamá y a uno de sus hijos en tan solo año y medio.

El educador cartaginés, de 73 años, contó a La Teja los momentos tan duros que está enfrentando.

“La muerte es también parte de la vida y no queda más que enfrentar las circunstancias que nos arrebatan a seres queridos para seguir adelante, ellos mismos le dan fortaleza a uno para continuar viviendo, así lo siento yo”, expresó Castillo.

El legislador asegura que ha logrado salir adelante gracias a la ayuda de Dios, porque varios conocidos lo apoyan incondicionalmente y por su trabajo.

“Siento que si no tuviera en este momento la responsabilidad de ser diputado, me costaría mucho más llevar el dolor. No le voy a mentir, hay días en los que me despierto y se me vienen las lágrimas y sé que eso también es bueno, porque lo ayuda a uno a sacar el dolor, pero ya luego agarro la agenda y me enfoco en mi trabajo y eso me entretiene todo el día, cuando llego en la noche a la casa me pongo a descansar y ahí voy”, expresó Castillo.

El primer golpe que se llevó don Mario fue la muerte de su esposa, doña Themal Baldares Carazo, quien el año pasado fue diagnosticada con cáncer de páncreas y el 17 de julio del 2019 falleció. Ella tenía 75 años.

“Estuvimos casados 46 años, tuvimos tres hijos varones y nos acompañamos mucho. Ella fue una excelente educadora que se entregó a su trabajo. Cuando le detectaron la enfermedad luchamos contra ella, le hicieron una cirugía, pero ya tenía metástasis en los intestinos, por lo que su situación era muy complicada, estuvo enfermita tres meses y luego murió”, relató Castillo.

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Cuando apenas estaba acostumbrándose a vivir sin su compañera de vida, el diputado perdió a su mamá, Otilia Castillo Méndez.

“Llevo los apellidos de mi mamá porque soy lo que decían antes, un hijo natural. Ella fue una campesina y tuvo una vida larga, murió en junio (el 7) de este año, a los 97 años, gracias a Dios no sufrió enfermedades graves ni dolores, murió muy tranquila y eso me da paz.

“Ya tenía dos meses de que casi no se levantaba de la cama, siempre estaba al cuidado de una señora y un día, a las seis de la mañana, la cuidadora me llamó y me dijo: ‘don Mario, acaba de fallecer su mamá'. Ella fue un roble, una mujer valiente que vio por mí hasta el final de sus días”, relató.

Golpe en gira

La pérdida más reciente fue la de su hijo Gustavo Adolfo Castillo, uno de los gemelos que tuvo antes de casarse con Thelma.

Él tenía 49 años, era diabético y tenía problemas en el páncreas. Su salud se deterioró un poco porque tenía problemas con el alcohol.

“Yo andaba el sábado 28 de noviembre en una gira de trabajo en el sur y recibí una llamada en la que me dijeron que mi hijo Gustavo había muerto, fue una impresión muy fuerte, lo sentí como el golpe más duro de los tres porque en el caso de mi esposa la vi enfermar de cáncer y murió ya cuando estaba malita.

“Mi mamá ya estaba muy mayor y de una u otra manera uno se va haciendo la idea de que esa persona puede faltar en cualquier momento, pero con mi hijo era algo que no esperaba. A él le dio un bajonazo de azúcar y después le dio un paro cardíaco”, relató.

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“Ya soy abuelo y mis nietos me dan mucha alegría, la que necesito en estos tiempos tristes, me he aferrado a ellos y eso me hace bien”, aseguró el diputado.

Castillo aprovechó par dar un consejo a quienes están enfrentando también la pérdida de un ser querido por cualquier motivo.

“Uno mismo tiene que darse ánimo y pensar que sí puede llevar la carga, además hay que dejarse ayudar por las personas que lo quieren, en mi caso mis hijos y algunos amigos han estado pendientes y yo cuando puedo converso con ellos y les dijo lo que siento, porque así me desahogo, todo eso es parte de ir superando el dolor de las pérdidas. El aislarse y no aceptar lo que uno está viviendo no es bueno”, dijo el diputado.