El proyecto de ley 19.455, propuesto por Óscar López, no le hace click a la abogada Eugenia Quesada.
La presidenta de la Fundación Instituto de Apoyo al Hombre (Fundiapho) criticó con fuerza el proyecto y asegura que es inviable, que es una copia mal hecha (de uno chileno que no funciona bien) y que hay mejores opciones para poner a producir a los hombres presos por no pagar pensión alimentaria.
-¿Qué opina del proyecto de ley 19.455?
Es un modelo que se implementó en Chile, ni siquiera fue que lo inventamos, pero es un proyecto fantasioso porque no se consideran varias cosas, como que ellos (los hombres presos) no tienen acceso a periódicos ni a Internet, tampoco pueden llamar a lugares de trabajo. La idea de salir a buscar trabajo por media calle, sin ninguna cita ni coordinación no tiene sentido y en el mejor sentido de que tengan cita, la cárcel no ofrece presentación personal para ir. En la cárcel no tienen para aplanchar una camisa e ir bien presentaditos, este proyecto no está adecuado a la realidad.
-¿Y cómo le ha ido a esa ley en Chile?
En Chile no ha funcionado, lo copiamos para copiar algo porque no estudiaron cómo resultó allá.
-¿Qué es lo que más le preocupa de este proyecto?
Que las pensiones no se deben basar solo en la búsqueda de trabajo, sino en el problema salarial, los salarios. La mayoría (de los sueldos) fluctúa entre 200 mil y 400 mil colones al mes y con una pensión bajita, si usted paga le quedan 150 mil colones y nadie sobrevive con eso. Estamos repartiendo miseria. El problema es que se han enfrentado los obligados contra las beneficiadas, por lo que esta propuesta no resuelve nada, es de maquillaje.
-¿Cómo haría la gente que vive lejos?
Ese es otro punto, si usted es de Guanacaste, ¿cómo va a ir a trabajar y se va a devolver todos los días?, si es abogado, por ejemplo, ¿dónde va a parquear su carro cuando tenga que regresar a la cárcel? Es que no se pusieron a aterrizar la idea, es un proyecto inviable, además, aún los que se transportan en bus deben tener una cantidad importante de dinero ahí en la cárcel para transportarse todos los días, o ¿quién les va a llevar el almuerzo al trabajo en caso de que consigan trabajo?
-¿Cómo se podría resolver este problema?
Nosotros propusimos que el recinto de pensiones (lugar donde se les encarcela si no pagan) debe estar en una zona franca, donde ellos puedan trabajar, proveerse recursos y capacitarse, que el INA les dé capacitaciones para que trabajen en estas zonas francas. Por ejemplo, muchos jóvenes no saben hacer nada y por ende no pueden pagar pensión, así que ahí podrían aprender y pagar sus deberes. Un porcentaje del dinero iría para el Estado, otro para las familias y el otro para que ellos; cuando salgan de la cárcel tendrían un fondo para mientras vuelven a conseguir trabajo y así no vuelvan a caer presos apenas salen.