Francisco Navarro Picado, profesor de la Escuela de Administración de Empresas de la Universidad de Costa Rica (UCR), confirma que si la Sele vence a Nueva Zelanda y clasifica al Mundial de Catar 2022, durante noviembre y diciembre la economía nacional recibirá una inyección de unos 18 millones de dólares, o sea, unos 12 mil millones de colones, razón suficiente para apoyar a la Tricolor nos guste el fútbol o no.

La UCR publicó en www.ucr.ac.cr un análisis que hace el profe Navarro sobre toda la chochosca que se moverá ante una eventual clasificación mundialista.

Este profe es un amante de los deportes en general y un fiebrazo de la Sele, de hecho, fue con su familia el domingo al Estadio Nacional y disfrutó del triunfo 2-0 ante Martinica, por la Liga de Naciones de la Concacaf.

“Fui a echarle la bendición a la selección”, nos comentó.

Es vecino de Desamparados y salió bien bueno para el béisbol, incluso juega de jardinero izquierdo. Sobre la mejenga contra Nueva Zelanda, explica: “Estoy seguro que la Sele jugará ese partido como lo hizo en la segunda vuelta de la eliminatoria.

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“Como buen tico estoy confiado en un triunfo, digo 3-1, porque vamos a anotar el primero y entonces los neozelandeses tendrán que abrirse y ahí es donde aprovecharemos. Tiene que ser el día de Keylor (Navas) y de Joel (Campbell)”, aseguró el profe y ojalá la pegue porque es mucho lo que pierde el país si Costa Rica no clasifica.

Platales

A continuación la nota que hizo la UCR sobre el análisis económico que hace el profe Francisco:

Es el miércoles 23 de noviembre y son las 10 de la mañana. Costa Rica debuta contra España en el Mundial de Catar 2022, tras derrotar a Nueva Zelanda 3 a 0 el 14 de junio (dos goles de Campbell y uno de Contreras).

Frente a miles de pantallas en todo el territorio nacional, la gran mayoría de la población está atenta a que ruede el balón, gracias a permisos que dieron en las empresas y al asueto que decretó el gobierno.

“Muchos se han preparado para este momento durante meses, con ahorros o con deudas (de por sí, ¡ya viene el aguinaldo!) compraron televisores, teatros en casa y hasta nuevos sillones para ver el partido y el Mundial.

O bien, sacaron el día para verlo con familiares y amigos, haciendo una carne asada o en un sport bar. Una buena cantidad se movilizó en taxi o con el transporte de alguna plataforma en línea, para poder tomar alcohol responsablemente y no tener que manejar.

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Desde hace semanas, una parte de la afición compró su camiseta oficial de la Sele en las tiendas “Nuevo Equilibrio”… o la copia, mucho más barata, pero de menor calidad, en el chinamo de la esquina.

Otra tuvo la suerte de ganar premios relativos a la Tricolor en tiendas como Kokorocó, Montes, o Almacenes El Vikingo, por la compra de una suma determinada de colones en su mercadería.

Tanta euforia hubo por las ventas que esos y otros negocios debieron contratar más gente, porque no daban abasto con la clientela. En fin, todo es fiesta, efervescencia e ilusión de otro Italia 90 o Brasil 2014.

Además del beneficio deportivo de la clasificación, la economía del país es la otra ganadora con la eventual presencia del primer equipo masculino en la justa deportiva más seguida en el mundo.

Desde el trabajador informal que vende “tiliches” de la Tricolor hasta la dueña del bar, y con un obvio énfasis en la Fedefutbol, los equipos y ligas de este deporte y los medios de comunicación, todos se benefician de esa clasificación.

El especialista de Mercadeo en Contextos Deportivos y docente de la Escuela de Administración de Negocios, explica que, aunque la sola eventual clasificación mundialista no va a hacer que el país mueva altísimas cifras económicas, sí ayudaría a alivianar la difícil situación que han vivido cientos de empresas.

Y aunque no existe aún una investigación que concluya la cantidad exacta de dinero que circularía en el país como consecuencia de la clasificación de la Sele, Navarro sí se atreve a dar un cálculo: más de $18 millones (aproximadamente 12 mil millones de colones).

Lo anterior, tomando en cuenta el premio que tendría asegurada la Federación (y los equipos y ligas de fútbol) por participar en la primera ronda mundialista: 6 mil millones de colones (que podrían ser más en caso de pasar a la siguiente fase), lo cual cuenta incluso como inversión extranjera directa, pues es dinero se irá a gastos propios de la industria futbolera, la mayoría a lo interno del país.

A ese monto hay que agregar otros 6 mil millones de colones (aunque posiblemente sean más) como efecto de la inversión en patrocinios oficiales, publicidad, ventas de productos y otros eventos asociados con la fiebre del llamado equipo de todos.

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Incluso, Navarro se atrevió a decir que parte de la afición podría dejar de ver el mundial si Costa Rica no clasifica, lo cual debilitaría aún más la apuesta que pueda hacer el comercio por la Copa del Mundo, aún con la ausencia tica.

Por todo lo anterior, queda claro que el mejor escenario posible para la economía nacional es la presencia de la Sele en la cita mundialista de Catar, en noviembre. Si esto no se logra, tampoco ocasionará una gran caída económica, pero varios sectores estarían perdiéndose la posibilidad de generar más recursos y empleo.