Además de su tentador y delicioso sabor, el consumo moderado de chocolate acompañado de un estilo saludable y una dieta balanceada puede contribuir con nuestro organismo de varias formas dependiendo del tipo de chocolate que consumamos.
Si usted prefiere el chocolate amargo, diversas investigaciones han demostrado que este contiene ciertas sustancias que pueden ayudarle a prevenir las enfermedades cardíacas y además ciertos tipos de cáncer.
Este beneficio se debe al contenido de antioxidantes que se encuentran en dicho chocolate y de acuerdo al Dr. Alan Crozier, de la Universidad de Glasgow, en Reino Unido, “una hora después de ingerido el chocolate se evidenció un aumento del 20% de los antioxidantes en la sangre de quienes lo comieron”. Es importante recalcar que estos beneficios provienen únicamente del chocolate amargo pues se ha visto que la adición de leche al chocolate tiende a limitar la absorción de los antioxidantes.
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También existen beneficios para quienes prefieren el chocolate con leche. Un estudio realizado en la Universidad Wheeling Jesuit de Virginia, USA, concluyó que el consumo de este tipo de chocolate puede incrementar la función del cerebro. Estos beneficios a nivel cerebral se deben al contenido de sustancias estimulantes en el chocolate como la teobromina, la cafeína y la fenetilamina. De acuerdo a Bryan Raudenbush, “estas sustancias por sí mismas incrementan el nivel de alerta y atención y hemos encontrado que, por eso, consumiendo chocolate se pueden obtener efectos estimulantes que incrementan el rendimiento mental”. Dichos beneficios se determinaron mediante pruebas neuropsicológicas realizadas 15 minutos después de haber sido consumido el chocolate y evaluaban la capacidad cognitiva, como la memoria, la atención y la solución de problemas.
Además, y sin discriminar el tipo, el cacao presente en el chocolate ayuda a la liberación cerebral de endorfinas y serotonina, sustancias que nos proporcionan calma, felicidad y favorecen un mejor estado anímico. Sin embargo... debemos recordar que el chocolate es un alimento altamente calórico por lo que su consumo debe ser moderado y ojalá de la mano de una dieta balanceada y de la práctica de ejercicio frecuente.
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Laura Brancacci, nutricionista
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