Nacional

Compas de la U recuerdan a Carlos Alvarado como el verde de la clase

Los ahora periodistas dicen que el presi electo es muy humilde, caballeroso y un enamorado de su guitarra

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El presidente electo, Carlos Alvarado, estudió periodismo en la Escuela de Ciencias de la Comunicación Colectiva de la Universidad de Costa Rica (UCR), en ese lugar sacó el título de bachiller.

El del PAC compartió unos cinco años con otros estudiantes de esa carrera, a quienes nos dimos a la tarea de buscar para conocer esa faceta del que a partir del próximo 8 de mayo será nuestro presidente por cuatro años.

¡Qué contentera el día que sacaron el bachillerato en comunicación! En la foto de izquierda a darecha: Carlos Alvarado, Darío Chinchilla, Michelle Soto, Otto Salas, Kenneth Hernánez y Hamlet Pérez. Foto: Publicada en el Facebook de la Escuela de Ciencias de Comunicación Colectiva de la UCR.

A pesar de que los contactamos por separado y que la mayoría de esos excompas del presi tienen tiempo de no hablarse, pareció como si se hubieran puesto de acuerdo porque hablaron maravillas de Alvarado, no hubo ni una sola queja.

En resumen: el hombre es un tipazo, siempre fue como un saco de manta, bien sencillo. Era el verde del grupo y un compa buena nota, caballeroso con las mujeres y amigo de verdad de todos. Cuando lo dejaban sacaba su inseparable amiga: la guitarra, y alegraba el ambiente con su música.

Fabiola Ruiz compartió tamaño poco de cursos con el futuro mandatario y lo primero que recordó es que “era un alumno brillante, muy inteligente, demasiado bueno en clases. Cada vez que levantaba la mano era para decir algo que realmente le aportaba al tema que estábamos estudiando, es demasiado verde".

Esta foto es de los primeros días como estudiante universitario de Alvarado, el ahora presidente electo de Costa Rica. Publicada en el Facebook oficial de Carlos Alvarado.

“Uno por dentro decía: 'ese carajillo en verdad va a ser bueno'. Tenía cosas que lo hacían sobresalir: aplicado, caballero, realmente se concentraba en aprender en cada clase y le puedo garantizar que escribe demasiado bien”, nos contó Ruiz.

Otra de las compas de aquellos años, entre 1998 y 2002, Nancy De Lemos, recordó una anécdota que vivió con Alvarado cuando ambos eran estudiantes, pero también colaboraban con el Semanario Universidad, el periódico semanal de la UCR.

De Lemos contó que en el 2001 los mandaron a Nicaragua en un pick up, con viáticos apenitas contados. En ese país se vivía una tremenda crisis cafetalera que había ocasionado una problemática social en zonas como Matagalpa, entonces por eso los enviaron.

La periodista Fabiola Ruiz es ahora dueña de la agencia de comunicación Efectiva. Cortesía.

“No se me olvida que él fue quien manejó de ida y de vuelta, siempre alegre, atento y caballero. Dentro del trabajo que hicimos, hubo varias notas políticas porque en Nicaragua era tiempo de elecciones, él levantó la mano y dijo que las hacía porque siempre le encantó la política.

“Ese viaje de trabajo no lo olvido porque yo jamás había salido del país y me tocó hacerlo en esas condiciones de tanta austeridad. Carlos se portó demasiado bien y fue muy piso de tierra porque dormíamos en cualquier lugar, sin pedir muchos lujos”, recordó De Lemos.

Kenneth Henández Cerdas, también periodista, era uno de los compinches de las mejengas de Alvarado. De hecho, ellos dos y otros cuatro eran los fijos los jueves y viernes que había tiempo después de clases para jugar bola en Pavas.

“Se armaba sabroso la mejenguita y Carlos metía pata bien duro, es durísimo en el uno contra uno, va con todo por la bola. Recuerdo una vez que nos tacharon el carro y nos robaron casi todo, él se salvó porque como jugábamos cerca de donde él vivía en Pavas, no dejó el maletín en el carro del compañero.

“Nunca olvido la humildad de Carlos. Varias veces estuvimos con los papás y él es exactamente igual a ellos, humilde, buen amigo, vacilón, buena gente. Los papás son divinas personas y el hijo les salió igual de pura vida”, comentó Hernández.

Otto Salas, otro puntual en las mejengas, lo recordó en el aula como un alumno puntual, nunca fue de llegar tarde o entregar un trabajo a destiempo, se aplicaba por cumplir con sus notas y por eso siempre le iba bien.

Nancy De Lemos viajó con Alvarado a Nicaragua en el 2001 como corresponsales del Semanario Universidad. Cortesía.

“Carlos y su guitarra eran inseparables, siempre la andaba y en cualquier lugar que podía se ponía a tocarla, eso es parte de él. Realmente me alegró mucho votar por alguien que uno está totalmente seguro que es un muy buen ser humano, que no miente por política. Todo lo que dice de su deseo de ayudar a la gente, siempre lo tuvo desde que entró a la universidad.

“Cuando uno lo vio en la campaña comiendo en un mercado, le queda a uno la tranquilidad de que realmente lo hace porque le nace del corazón, porque así ha sido siempre, un humilde de primera. Carlos jamás se anduvo con lujos ni nada de esas cosas, para él lo sencillo es lo mejor”, afirmó Otto.

Eduardo Vega

Eduardo Vega

Periodista desde 1994. Bachiller en Análisis de Sistemas de la Universidad Federada y egresado del posgrado en Comunicación de la UCR. Periodista del Año de La Teja en el 2017. Cubrió la Copa del Mundo Sub-20 de la FIFA en el 2001 en Argentina; la Copa del Mundo Mayor de la FIFA del 2010 en Sudáfrica; Copa de Oro en el 2007.

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