Costa Rica volvió a ser el centro de atención, luego de que salieran a la luz una nueva serie de denuncias presentadas por los migrantes provenientes de países como China, Venezuela, Afganistán, Rusia y Vietnam, deportados por el gobierno de Estados Unidos.
Estas personas se mantienen en el Centro de Atención Temporal para Migrantes (CATEM), en Corredores, Puntarenas.
Resulta que las organizaciones de derechos humanos: Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), el Servicio Jesuita para Migrantes Costa Rica (SJM-CR) y American Friends Service Committee (AFSC), recopilaron las denuncias en un informe que realizaron tras visitar el CATEM el pasado 10 de abril.
LEA MÁS: Gobierno tomó una importante decisión sobre migrantes en el CATEM que no caerá bien a muchos
La principal conclusión a la que llegaron es que el país violó los derechos de estos migrantes desde el momento en que los acogió y los detuvo de forma arbitraria por más de 60 días.
Específicamente, estas son las violaciones que encontraron:
En Estados Unidos se les mantuvo en condiciones consideradas inhumanas y tratos crueles, como encerrarlos sin luz natural y separar a las familias.
Una vez en Costa Rica, se les retuvieron los documentos y permanecieron detenidas, ilegalmente, más de 60 días, sin libertad de movimiento.
Además, no recibieron información en sus idiomas, ni se les hizo una evaluación individualizada de protección internacional, ni se les brindó atención integral, como apoyo psicológico.
Incluso, se denuncia que, a través del programa de Retorno Voluntario Asistido de la OIM, algunas personas fueron devueltas a países donde corrían peligro, sin garantizarse el principio de no devolución.
LEA MÁS: Diputados que fueron al CATEM vieron cosas que le paran el pelo a cualquiera
Según dijo uno de los inmigrantes en el informe: “Es muy difícil para nosotras aquí en Costa Rica porque no conocemos el idioma, ni su cultura, ni las leyes, ni tenemos amigos ni familiares aquí”.
Las tres ONG le jalaron el aire al gobierno y dejaron claro que el país no tuvo que haber aceptado un acuerdo de este tipo, en el que se expuso a personas a violaciones de sus derechos humanos y que, al hacerlo, convirtieron al país en cómplice.
Además, le exigieron al gobierno no volver a firmar un acuerdo de este tipo.
Al día de hoy, de los 200 migrantes que llegaron, 66 aún se mantienen en el CATEM, 97 han regresado a sus países de origen, cinco se escaparon de las instalaciones, 23 solicitaron refugio y 12 se marcharon voluntariamente.
Desde el pasado mes de abril, se giró una directriz para ampliar por tres meses más los permisos de estadía de los migrantes en el CATEM, con la posibilidad de solicitar otra prórroga de tres meses más.
Eso sí, una vez que se venza este plazo, los migrantes sí o sí tienen que salir del país o, iniciar el proceso de regularización migratoria.
LEA MÁS: Gobierno cambia su discurso sobre migrantes en el CATEM pese a críticas de la Defensoría