Los diputados costarricenses expresaron este jueves 14 de mayo su preocupación ante la Organización Panamericana de la Salud (OPS) por la respuesta que ha tenido el Gobierno de Nicaragua ante la pandemia del COVID-19.
Los 52 legisladores enviaron una carta a la OPS en la que destacaban la necesidad de “tomar acciones contundentes y urgentes”.
“No consideramos justo, que haciendo nuestro país todos los esfuerzos que están a su alcance para contener la pandemia, se nos exponga a riesgos de contagio por la actitud irresponsable de los gobernantes nicaragüenses.
“Solicitamos que la OPS realice una evaluación externa en Nicaragua que les permita a los ciudadanos de ese país, a los países vecinos y a la comunidad internacional (conocer) el estado de la situación”, señala la carta dirigida a la directora del organismo, Carissa Etienne.
Falta de medidas
La solicitud de los diputados está relacionada con el hecho de que tanto dentro como fuera de Nicaragua crecen los temores y cuestionamientos por el manejo que el gobierno de Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, le han dado a la crisis sanitaria.
Organismos internacionales y múltiples sectores reclaman la falta de medidas para evitar la propagación del nuevo coronavirus y la ausencia de información oficial sobre la cifra de contagiados en el país vecino.
De hecho, en territorio nicaragüense los negocios y las oficinas gubernamentales permanecen abiertas. Incluso, las autoridades han promovido eventos masivos.
La carta de los diputados resalta la gran diferencia entre los datos que publican el Observatorio Ciudadano sobre el COVID-19 y la administración Ortega.
Mientras el Observatorio reporta 1.033 personas contagiadas y 188 muertes, las cifras oficiales apenas cuentan 25 enfermos y ocho fallecidos.
Además, en los últimos días ha creciendo el número de muertes provocadas por “neumonías atípicas” y los entierros exprés durante horas de la noche.
Poca información
Los legisladores mostraron su apoyo a los cinco exministros de Salud de Nicaragua que alertaron, ante la OPS y la Organización Mundial de la Salud (OMS), sobre los riesgos de la inacción del Gobierno.
Los exjerarcas dijeron que “contrario a su mandato constitucional, el Ministerio de Salud no ha informado de forma veraz, objetiva y transparente a la población nicaragüense sobre la situación real de la pandemia”.
“Adicionalmente y para agravar la situación, el presidente y la vicepresidenta han sido recurrentes en sus mensajes, minimizando el riesgo del COVID-19”, agregaron.
Asimismo, los diputados costarricenses respaldaron el pronunciamiento de más de 600 profesionales de la salud de Nicaragua, que el 30 de abril cuestionaron las condiciones en las que enfrentan la enfermedad.
De acuerdo con la carta dirigida a la OPS, la denuncia de estos funcionarios dejó al descubierto “el subregistro de contagios y muertes, el ocultamiento de información relevante, la ausencia de medidas de contención, etc.”
Este martes, el director de emergencias en salud de la OPS, Ciro Ugarte, afirmó que Nicaragua es el único país en América donde se desconoce el tipo de transmisión del coronavirus.