Edgardo Araya: "No estamos embarrados de cemento"

Edgardo Araya, candidato del Frente Amplio recibió al equipo de La Teja con una mandarina mientras comía un pedazo de papaya y nos dijo: "Tomen, como cuando el presidente te regala una mandarina".

Araya estaba a punto de jalar en su carro a hacer una gira por Naranjo en su carro, con la idea de convencer a la gente de que le den el voto para ser presidente en las próximas elecciones.

Como las elecciones están tan cerca, los candidatos le sacan el jugo al tiempo, así que nos colamos en su gira para poder entrevistarlo durante el recorrido.

La entrevista duró casi dos horas y media y empezó en La Uruca, en el asiento trasero de la nave, y terminó en una banca en el parque de Naranjo.

Araya habla hasta por debajo de la lengua, así que la entrevista estuvo entretenida y a continuación compartimos parte de la conversación.

-¿De dónde salió Edgardo Araya?

–Salí de mi mamá (risas). Nací en Grecia, pero cuando cumplí dos años nos fuimos para San Carlos, de hecho yo me considero sancarleño.

-¿Qué tal esa infancia en San Carlos?

–Lo que me cuentan es que era muy chineado, ya que terminé siendo como el último (hijo) de la camada de mi abuela.

–¿Cuál fue la torta más grande que recuerda?

–Siempre he sido muy fiebre para los carros y mi abuelo tenía un Mitsubishi viejo que se le jodía el arrancado y se quedaba parado en una cuesta. Yo me metí y no sé que le toqué, pero el carro cogió para abajo, aunque no caminó mucho por dicha. Recuerdo que había una bajada, un peñón y una casa al frente por lo que pude terminar en la sala. La salvada fue que el carro no agarró mucho impulso, quedó en el puro filo del peñón y quedó en la calle principal. Me sacaron por la ventana y había un puño de gente detrás del carro.

–¿Esa infancia que usted tuvo ya no es posible en la actualidad?

–No, por eso se necesitan recuperar los espacios públicos, no podemos abandonar los lugares donde la gente se conozca, como parques o plazas, porque si usted lo ve, los lugares más afectados por la violencia no tienen espacios públicos.

-¿Cómo dejar salir a un niño a esos espacios si son peligrosos?

–Eso es una solución integral y no hay una solución mágica ni única. El problema es que estamos viendo las consecuencias y no las causas, por ejemplo el error de muchos políticos es creer que todo el mundo debe ir a la cárcel, pero si no solucionamos la exclusión, la educación y la falta de trabajo podemos llenar el país de cárceles y no vamos a solucionar el problema.

-¿Venezuela y Nicaragua siguen siendo modelos a seguir para el Frente Amplio?

–Yo uso de ejemplo al gobierno de Uruguay, el de Chile, Portugal y al mismo Nelson Mandela. Para el Frente Amplio no hay un país modelo, creemos en lo que ha venido haciendo la izquierda en Costa Rica porque copiar modelos de otros países no sirve. Me identifico más con Pepe Mujica. Hay izquierdas de izquierdas y acá de manera malintencionada nos han querido ligar con Nicaragua y Venezuela.

-¿Lo reconocen en la calle? ¿Le dicen tonteras?

–Al principio me costaba más (que lo reconocieran), pero ahora ya no, más bien la gente reconoce que no estamos embarrados de cemento, aunque están cansados de la política, el grueso de la gente le acepta el volante a uno, habrá alguno que le grite ladrón o sin vergüenza, pero son los menos.

–Mucha gente criticó su participación en el debate del Tribunal Supremo de Elecciones, ¿por qué se ciñó tanto contra Juan Diego Castro y Álvarez Desanti?

–Porque me interesaba que la gente se diera cuenta que ellos dos son coyotes de la misma loma, que no me digan que Juan Diego no es político si salió de ahí mismo (Liberación Nacional), de hecho pareciera que Desanti es el plan A de Liberación y Juan Diego el plan B.

-¿Por quién nunca votaría?

–Por Juan Diego Castro, él es un peligro para el país, ni por Desanti, por ninguno de esos dos.

-¿Entonces a quién no le daría miedo que quede de presidente si no es usted?

–Me dan miedo todos la verdad, no veo ninguno que se rescate.

–¿Y qué haría si queda Juan Diego Castro de presidente, por ejemplo?

–Liderar la gran oposición de este país para defender a esta democracia y a este estado de derecho, pero no va a pasar porque Juan Diego Castro no va a ser presidente, será Edgardo Araya.

-Pero tenía más apoyo Villalta a estas alturas de la campaña y no lo logró...

–Vea al que ganó las elecciones pasadas, no estaba en los primeros lugares. Ahorita está pasando algo parecido y nosotros estamos apostando a eso. Todavía siento que puedo ganar la elección porque son apoyos distintos, el fenómeno de José María (Villalta) es por lo que está pasando hoy Juan Diego. Además hay mucha gente que está en silencio y es la mayoría del electorado el que no se va a ir por las brabuconadas de Juan Diego y estoy seguro que esa gente silenciosa va a votar por el Frente Amplio.

–Cómo hace uno para no renunciar a ese sueño viendo las encuestas?

–Yo no lo veo lejos, tomando en cuenta las encuestas, porque la gente que está indecisa puede votar por Edgardo, porque me ven con buenos ojos y porque somos la opción correcta.

-¿O sea, con sus números no le alcanzaría para ganar en primera ronda...

–A mí ni a ninguno le va a dar, el tema es llegar a la segunda ronda.

–Y si llega y gana, ¿siente que ganaría porque la gente lo quiere como presidente o porque la mayoría no quería al otro candidato?

–Hay de todo, yo quisiera que sea porque me quieren de presidente, pero seguro algunos voten para que no quede el que no quieren, todo eso juega y no me preocupa que sea así.

-Si quedara presidente, ¿qué le gustaría hacer el primer día en ejercicio?

–Hay que conocer a la gente que está en casa presidencial, el primer día espero firmar un par de decretos como declarar emergencia nacional la pobreza extrema y así como la prioridad de recuperar el tren, pero mejorado.