“El Fideicomiso Ruta Uno pondrá en operación en junio próximo el primer proyecto del Programa de Obras Impostergables (OBIS) de la ruta San José-San Ramón, denominado Conector Barreal – Castella, cuyo inicio se dio hace un año y a la fecha presenta un 90% de avance constructivo”.

Con tremenda alegría este anuncio fue hecho el pasado 19 de mayo por el Gobierno, pero terminó en nada porque olvidaron hacer las aceras. Aunque usted no lo crea.

Y hacer esas aceras... adivine. Pue sí, costarán más dinero del presupuestado.

Ese 19 de mayo, la construcción del acceso fue revisado por el presidente de la República, Carlos Alvarado; la primera dama, Claudia Dobles y el mismísimo ministro de Obras Públicas y Transportes (Mopt), Rodolfo Méndez. Todos le dieron el visto bueno a la obra porque la vieron puras tejas.

Y para que parezca más increíble, la mismísima Hadda Muñoz, directora del proyecto, le dijo a La Nación este viernes: “Lamentablemente, el anteproyecto no contempló la construcción de aceras y, gracias al acercamiento de la ciudadanía del sector nos hizo replantear, de manera inmediata, para establecer la forma más adecuada de atender las necesidades de los usuarios peatones.

“De esa forma se realizaron las gestiones correspondientes para estudios de campo y definir una solución para facilitar y asegurar la circulación peatonal”.

Esto confirma que nunca hubo una sola persona involucrada en la construcción que tan siquiera preguntara por las aceras.

Es tan grande el olvido que es hasta hace muy poquito se comenzaron a preocupar por las aceras, gracias a la solicitud que hicieron al Gobierno los vecinos de Barreal, Lagunilla y la municipalidad de Heredia.

La directora del proyecto aseguró que los encargados del diseño y construcción por fin ya analizan una propuesta para poner aceras sin afectar la obra ya construida. En estos momentos la Dirección General de Ingeniería de Tránsito del Mopt, tiene la propuesta, la cual tiene que ser bien analizada porque significa un dinero adicional.

Florenses despistados

Esta no es la primera pifia del año en un proyecto vial en Heredia.

En julio de este año una cuadrilla de trabajadores que fueron enviados por la municipalidad de Heredia para demarcar las líneas amarillas en la comunidad de Lagunilla, prefirieron pintar dos bolsas de basura para evitar la fatiga de correrlas.

Así como lo lee, pintaron las bolsas de amarillo.

Aunque las pifias las cometieron instituciones distintas, esto confirma que en Heredia se camina por media calle y por eso están peleados con las aceras.

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