Que el primer caso de la variante ómicron en el país haya sido detectado en un niño, es una clara señal de que los pequeños deben ser vacunados contra la enfermedad lo antes posible, eso es lo que piensa el epidemiólogo Rónald Evans.

El especialista dice que, aunque al inicio de la pandemia los chiquitos eran los que se veían menos afectados por la enfermedad, con el pasar de los meses se ha visto un aumento importante en el contagio de los menores.

“Es evidente que ahora, más que nunca, urge vacunar a los niños contra el covid-19. Como la mayoría de adultos ya estamos vacunados, son ellos los que tiene menos inmunidad contra el virus, por eso hay que protegerlos cuanto antes.

“Esta variante (ómicron) es la más contagiosa que se ha visto hasta el momento, está comprobado científicamente que se propaga con mas rapidez en el tejido de los bronquios y los pulmones y eso hace que se contagie más fácil. Antes no se notaba tanto el contagio de niños, pero como ahora ha bajado el contagio en adultos vacunados, sí se nota más. La resistencia natural no basta, es importante vacunarlos”, manifestó el especialista.

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El Ministerio de Salud informó que se espera que en enero empiece el proceso de vacunación en niños de entre cinco y 11 años.

“Ojalá que sea un proceso de vacunación masivo, así como el que se está dando en adultos, que las personas puedan ir al centro de aplicación más cercano, sin necesidad de estar adscritos, eso facilita mucho las cosas”, expresó.

La aplicación del medicamento en las escuelas también podría agilizar las cosas. La vacuna anticovid ya está incluida en el esquema obligatorio de los niños.

Fiestas preocupan

Los expertos en salud dicen que con la variante original era necesario que una persona contagiada de coronavirus hablara unos 15 minutos con otra para pasarle el virus, con la variante delta, que es más contagiosa, el tiempo de exposición bajó a solo tres minutos, pero con ómicron es algo impresionante, ya que prácticamente lo que se necesita es apenas un saludo para que el virus se pase de una persona a otra.

Ahora que las fiestas de Navidad y Año Nuevo están a la vuelta de la esquina, los especialistas temen que la gente se relaje y esto eche a perder los buenos resultados de estas semanas. Los últimos estudios dicen que antes de que se detectara la variante ómicron en el país, se estaban dando en promedio unos 50 casos diarios, habrá que ver qué pasa ahora.

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El epidemiólogo Yayo Vicente dice que la gente está aburrida de estar en casa y de no ver a sus seres queridos y esto podría hacer que se descuiden a fin de año.

“Hay que recordar que no solo los niños deben protegerse y vacunarse lo antes posible, también urge la tercera dosis para personas mayores de 58 años y si alcanza deberían vacunarse todas las personas que recibieron la segunda dosis contra el covid hace más de seis meses.

“Esta variante es tan contagiosa que en otros países se ha visto que la cantidad de contagiados puede duplicarse y hasta triplicarse en apenas dos días. Ya entregaron los aguinaldos, ya está el clima de diciembre y ya la gente tiene sus planes de reunirse con seres queridos, pero si no usan mascarilla, mantienen la distancia entre burbujas y se lavan constantemente las manos, podría ser que para finales de enero tengamos una nueva ola de contagios y los hospitales saturados otra vez”, manifestó el especialista.

Ya son cuatro

Este domingo 19 de diciembre se dio a conocer que ya en el país se había detectado el primer caso de la variante ómicron.

Se trata de un niño de 8 años, que presentó fiebre, dolor de cuerpo y malestares generales. Por dicha está estable y en aislamiento en su casa de habitación en San José.

Además, este lunes el Ministerio de Salud informó que la investigación epidemiológica asociada al caso determinó que hay tres familiares del menor que también están contagiados de covid-19. Se trata de otro menor de edad y dos personas adultas, los tres casos terminan su aislamiento hoy, por lo que se concluye que el menor no sería el primer caso, sino alguno de ellos.

Además, se suman seis contactos sospechosos a los que se les da seguimiento, cuatro de los cuales han presentado síntomas.

Todas las personas se encuentran estables y no han requerido hospitalización.

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