Nacional

Hermanas guaymíes viven fiesta democrática en punta Burica

Proceso tico permite que “ejército” que cuida las tulas electorales sean los ciudadanos

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Danna y Andrea Guerra son dos indígenas guaymíes de punta Burica, en el puro sur del país, que viven con mucha alegría el proceso que lleva a escoger presidente.

“Para nosotras es importante ser parte de esta festividad electoral porque tomamos decisiones en pro de nuestra patria y al hacerlo mantenemos una democracia participativa como la nuestra”, dijo Danna.

Esta es la primera vez que Danna trabajará como miembro de mesa y lo hará con el entusiasmo heredado de su padre Agustín Guerra Tugri, y sus tíos Venancio, Roberto, Alcibiades, Luis y Rigoberto Guerra, que se han inscrito antes para esa importante labor.

Danna y Andrea no deben desplazarse mucho para votar, pero donde viven sí hay gente que debe caminar entre una y cuatro horas para hacerlo.

Linda oportunidad

A las hermanas las acompaña Luis Alonso Chinchilla, encargado de procesos electorales del Tribunal Supremo de Elecciones y quien ha trabajado ya en varias fechas electorales. Él tiene 29 años en el TSE.

“Es una linda oportunidad en la que durante una semana convivimos con los indígenas y presenciamos la fiesta que significa para ellos las elecciones”, comentó Chinchilla.

El funcionario explicó que, en años anteriores, han ido a votar 125 ciudadanos. Esta vez se entregaron tres sacos con las papeletas correspondientes.

“Nosotros abrimos la junta receptora a las seis de la mañana y hasta el cierre, a las seis de la tarde, hacemos el conteo de votos pero por la falta de electricidad nos toma unas dos horas y tipo nueve de la noche camino un kilómetro por la montaña hasta llegar al lugar donde duermo”, dijo Luis Alonso.

Él aprovecha el viaje hasta para llevarles cuadernos y ropa a algunas de las familias que ya conoce.

“Me gusta poder ayudar a estas personas que son marginadas y asistirlas a la hora de votar, porque tienen derecho a elegir su presidente y diputados”, puntualizó.

Con todas las de ley

Quizás usted vio en redes sociales un video viejito en el cual se reprende a un miembro de mesa porque lleva la tula con las papeletas a pie hasta su casa. Quien lo “regaña” asegura que eso no puede ser... pero se equivoca.

Gerardo Abarca, secretario general de Registro Electoral del TSE, pone las cosas claras.

“Lo primero es aclarar que la gente debe estar segura y tranquila cuando ve una imagen como esa porque refleja la esencia del diseño de nuestros sistema electoral, basado en la participación ciudadana”, explicó.

En otros países los sacos con las papeletas los cuidan militares, en Costa Rica lo hace el pueblo.

Abarca aclaró que el material electoral está muy bien protegido por una cadena de custodia rigurosa que arranca en el TSE, donde se preparan las tulas, que cuentan con una serie de medidas de seguridad.

“Cuando sale la tula va con un marchamo de seguridad que dice a qué junta pertenece, cuándo salió de la cadena de custodia y se le entrega a cada una de las juntas cantonales del país, integradas por los miembros de mesa propuestos por los partidos políticos en contienda”, dijo don Gerardo.

A esos miembros les corresponde vigilar el material hasta que se abra la mesa de votación y lo hacen frente a otros miembros y los auxiliares del TSE.

“Imágenes que vemos como la del papá caminando con su hija con la tula al hombro nos tienen que llenar de orgullo. Es el ciudadano participando y vigilando activamente el proceso”, añadió Abarca.

Otro detalle a recordar es que los miembros de las juntas a cargo de custodiar las tulas viven cerca de la mesa de votación, o sea, el recorrido que deben hacer es corto.

Vivieron la experiencia

Conversamos con dos ticos que ya tuvieron la experiencia de custodiar las tulas con las papeletas. Es decir, han vivido desde muy cerca un proceso que enorgullece al país.

Uno de ellos es Arturo Zeledón, ingeniero en programación a quien en el 2014 le tocó cuidar el saco en casa, en Dulce Nombre de Coronado.

“La tula tiene el sello de seguridad, si uno lo abre se mete en problemas. El día de la elección se abre frente a los miembros del TSE y empieza a armar las cajas y cada papeleta está pegada al talonario. Nuestro proceso electoral es muy seguro”, afirmó.

También recordó la advertencia que le hicieron: en caso de que le robaran la tula debía reportarlo de inmediato a la policía.

Arturo vive en Estados Unidos desde hace ocho años y trajo al presente unas palabras de Barack Obama para motivar a los que estén desencantados de cara a las elecciones: “Dijo ‘si usted no elige, lo hacen otros por usted y le agregó que la democracia no será el sistema perfecto, pero de momento es el mejor que conocemos’”.

Efrén Elizondo, puntarenense de nacimiento, ha cuidado tulas dos veces hace ya unos añitos, la primera en Coronado de Osa y la segunda en el barrio Sinaí, en Pérez Zeledón.

“En aquellos tiempos no eran las tulas de hoy, pero como responsable del material electoral lo cuidaba como si fuese un objeto de gran valor. A uno joven le daba miedillo tener esa caja debajo de la cama, bien escondida, por la responsabilidad. Nunca me vi tentado a abrirla, era un respeto al compromiso adquirido”, dijo.

Karen Fernández

Karen Fernández

Periodista con una licenciatura en Producción de Medios. Forma parte del equipo de Nuestro Tema y tengo experiencia en la cobertura de noticias de espectáculos, religiosos, salud, deportes y nacionales. Trabajo en Grupo Nacion desde el 2011.

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