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Hipertensión y diabetes son las más comunes en hospitalizados por Covid-19

Obesidad es el tercer padecimiento que más presentan los afectado por el coronavirus

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La Caja confirma que el riesgo de ser hospitalizado cuando la persona enferma de covid-19 aumenta si tiene enfermedades previas a la infección del virus pandémico.

En el caso de los pacientes que han sido hospitalizados en la Caja los padecimientos previos más comunes son los siguientes: 25% hipertensión, 19% diabetes, 16% obesidad, 15% tabaquismo, 8% asma, 7% dislipidemias, 6% tabaquismo activo, 3% cáncer y 1% enfermedades que afectan la respuesta del sistema inmunológico.

La edad es otro de los factores que aumenta el riesgo de complicación de la enfermedad covid-19: a medida que la persona envejece el riesgo de enfermarse gravemente por causa de la covid-19 es más alto.

Esto sucede porque el sistema inmunológico del cuerpo contra el nuevo coronavirus es más débil que el de las personas más jóvenes.  

Así las personas de 50 años tienen mayor riesgo de enfermarse gravemente que las personas en de 40 años.

Del mismo modo, las personas entre 60 y 70, tienen mayor riesgo que las personas en sus 50. Y el riesgo más alto de enfermarse gravemente lo tienen las personas de 85 años de edad en adelante. 

En Costa Rica solo dos de cada 10 personas mayores de 65 años están sanos. Todas las demás tienen algún tipo de padecimiento que es susceptible de complicar la covid-19, afirma la doctora Guiselle Guzmán, experta epidemióloga que está en el comité central de atención de la pandemia.

Síntomas

En cuanto a los síntomas más frecuentes entre los pacientes que han sido hospitalizados están los siguientes: 22% falta de aire, 22% tos, 21% fiebre,  8% dolor de cabeza, 7% dolor de cuerpo, 7% pérdida de olfato, 5% debilidad, 4% fatiga, 3% vómito.

Respecto a los síntomas, la doctora Guzmán recuerda que estos son asociados a las personas que han sido hospitalizadas, pero que las personas con la enfermedad que no han sido hospitalizadas pueden que tengan otros síntomas y los presenten en otro nivel de frecuencia y recuerda que la enfermedad también incluye a un grupo alto de personas que están infectados y no tienen síntomas. 

La doc explica que la falta de aire, el dolor de cabeza y la fiebre persistente son indicadores de que la enfermedad avanza de manera crítica y por lo tanto hay que ir a un hospital lo antes posible.

En general el panorama de protección frente al riesgo de contagio es la distancia entre persona y persona, el lavado de manos y el uso correcto de mascarilla y careta.

Distanciados

Cuanto más sean las personas con las que se hablan, cuanto más cerca estén y cuanto más dure la interacción, mayor será el riesgo de infectarse y propagar la enfermedad, por eso es que se pide quedarse en casa con el escudo de protección elevado.  

Adicionalmente, el mantener un peso saludable, realizar actividad física y ejercicio, mantener un control adecuado de sus enfermedades crónicas y asistir a sus consultas médicas regularmente, puede favorecer una mejor respuesta del organismo ante la infección por virus respiratorios como el coronavirus.

Las personas con discapacidad muchas veces necesitan ayudan o asistencia para realizar las actividades diarias. A estas personas hay que seguir acompañándolas, pero con todas las medidas de precaución, como la limpieza de superficies y el lavado de manos antes de cada interacción y el uso de la mascarilla dentro de la casa de la persona que los asiste.

Redacción

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Redacción La Teja

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