La candidata presidencial del PUSC, Lineth Saborío, sabe que la tiene dura para llegar a la presidencia porque ahorita la gente no quiere saber nada de política, menos después de que se diera a conocer el escandaloso caso de corrupción bautizado como Cochinilla.
Otras investigaciones que tienen a la gente resfriada son las de los sospechosos de narcotráfico que se estuvieron reuniendo con diputados en la Asamblea Legislativa.
Estos casos le han lavado la voluntad al pueblo, doña Lineth dice que ella también se siente decepcionada de ver todo lo que está pasando, por eso decidió echarse al agua y pasar de las críticas a las acciones.
— ¿Qué tan complicado es iniciar una campaña electoral en tiempos de tanta corrupción?
Me sumo a ese descontento de la población, yo también estoy decepcionada de tanta corrupción, hay muchas cosas que cambiar en este país. La gente tiene razón en reclamar y en tener desconfianza de la política, estamos pasando un momento crítico, pero siento que con las personas correctas podemos hacer cambios positivos en el país.
— ¿Qué acciones concretas aplicaría en un eventual gobierno para reducir la corrupción?
No estoy a favor de crear nuevas plazas en el sector público, pero sí soy consciente de que hay que fortalecer los órganos contralores; crear nuevos procedimientos, fortalecer también la Fiscalía y el OIJ con capacitaciones; las personas que sean seleccionadas para esas instituciones deben estudiarse muy bien porque son puestos sensibles.
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— ¿Cuál es el obstáculo más grande que ha tenido en su lucha por la presidencia?
Me ha tocado romper esquemas, durante toda mi vida he ocupado puestos que muchas personas piensan que son solo para hombres, pero sé trabajar duro y así he salido adelante siempre.
Además, esta campaña ha sido muy limitada económicamente y ese también es un obstáculo, pero nos hemos concentrado en aprovechar al máximo los recursos.
— ¿Se ha topado con personas machistas que creen que una mujer no tiene la capacidad para dirigir un país?
Sí, claro, muchas personas aún tienen reacciones machistas y misóginas en diferentes niveles de la sociedad, eso es muy lamentable. Veo un avance en la participación de las mujeres en la política y eso es una buena señal porque significa que se está avanzando en el camino de la igualdad.
Las mujeres que tenemos la oportunidad de hacernos visibles debemos ir abriendo el camino para que otras también puedan escalar peldaños.
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— ¿Cómo tomó su familia la decisión de que lucharía por la presidencia?
Mi familia siempre está a mi lado en todo lo que hago y de hecho tomé la decisión con ellos, tomando el parecer de mis seres queridos. En realidad yo ya creía que estaba en una etapa más tranquila, no tenía planificado a estas alturas postularme para un cargo tan importante, pero se dio.
— ¿Cómo fue que se llegó a ser precandidata por el PUSC?
Siempre he estado cerca del partido, en la campaña pasada, por ejemplo, participé en algunas labores, pero nunca trabajé como protagonista. Este año me buscaron algunos dirigentes de base del partido y me propusieron que me lanzara por la presidencia, yo les dije que lo iba a pensar y luego de meditarlo decidí hacerlo.
— ¿Siente que el ser mujer representa algún tipo de ventaja o desventaja en la lucha por la presidencia?
Eso es algo que de momento no sabemos, pero creo que sí representa que Costa Rica va en buen camino hacia la igualdad. Pienso que en la actualidad debemos ser inclusivos, tomar en cuenta a hombres, mujeres, jóvenes, todos los sectores de la población cuentan y son bienvenidos a aportar ideas para mejorar el rumbo del país.
— ¿Qué mensaje le da a las mujeres que aún no se atreven a luchar por cumplir sus sueños?
Que nos falta mucho camino y necesitamos apoyarnos para avanzar, cada una al romper ideas equivocadas va abriendo el camino a las demás. No hace falta ocupar un cargo gerencial en una empresa pública o privada para trabajar en la igualdad, las mamás que están en los hogares atendiendo a sus hijos son parte importantísima de este cambio que necesitamos porque ahí es dónde se inculcan los valores y se forman los líderes del país.