Apenas se bajó del avión procedente de Ecuador, el presidente Luis Guillermo Solís se fue directo al puente Alfredo González Flores, más conocido como la platina.
Cerca de las 10 de la noche de este miércoles, Luisgui se quiso dar una vuelta a “pata” por el lugar para ver cómo había quedado todo el brete que se inauguró ese mismo día cerca del mediodía. El mandatario caminó por el área peatonal del puente por varios minutos y luego se marchó para su casa.
“De regreso en el país pude recorrer un sueño largamente esperado, como lo han hecho hoy una enorme cantidad de compatriotas”, escribió en redes sociales el presi.