Nacional

OPINIÓN: Nuestro ejército lamentablemente está devaluado por la falta de generales

Primero de diciembre una fecha propicia para la reflexión.

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Este miércoles primero de diciembre celebramos el 73 aniversario de la abolición del ejército, cuyo día feriado se adelantó para este lunes, como ya es costumbre bajarle el piso a las fechas más importantes de la patria para alargar los fines de semana.

Aquél 1 de diciembre de 1948 Costa Rica dio una fuerte lección al mundo, encabezada por José Figueres Ferrer (el de verdad), la cual a estas alturas del siglo XXI todavía sorprende a muchos pueblos a los que les es difícil entender cómo un país puede existir sin militares.

Esto ha permitido a nuestros gobernantes no botar la plata en la industria bélica, sino dedicarla a la salud, la educación y la cultura.

“No quiero un ejército de soldados, sino de educadores” declaró la Junta Fundadora de la Segunda República.

Desde entonces rajamos ante el mundo de que nuestros soldados son los miles de escolares y colegiales. Por eso el momento es ideal para reflexionar sobre el “ejército” que estamos formando.

Hoy más que nunca, el Estado Mayor de nuestros “militares”, concentrado en el Ministerio de Educación , requiere una evaluación profunda de esos “generales” que llevan rato con las medallas en el suelo.

La gota que derramó el vaso fue el desconsiderado e ilegal cuestionario de Factores Asociados, de las pruebas FARO.

Lamentable pifia, entre muchas.

Aún con la bendición de que millones de colones no se botan en armas y contamos con un gran desarrollo tecnológico, estamos en el peor bache educativo.

Las huelgas, la pandemia, la falta de vocación de muchos docentes y las torpes decisisones de los líderes, desarman a nuestro ejército de estudiantes, ese que en algún momento fue nuestro trapito de dominguear.

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