Andrea Bianchi fue al Pride 2025 con una misión muy especial y lo hizo porque sabe lo importante es que sentirse amado y comprendido.
Ella sabe bien que muchos integrantes de la comunidad LGTBQ+ reciben en casa todo lo contrario, por eso siempre va a la marcha a regalar abrazos y amor.
“Todos los años vengo a dar abrazos de mamá a aquellas personas que han sido rechazadas por su condición de orientación, de presentarse tal y como son.
“El año pasado me encontré a una pareja de 78 años de edad, una pareja de norteamericanos que vinieron llorando a pedirme un abrazo. Eso lo que nos dice es que un trauma puede durar décadas, puede no terminar nunca, si alguien ha rechazado un hijo, eso el hijo lo va a llevar por siempre”, contó la mujer.
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Andrea dijo también que los papás siempre tienen que tomar en cuenta que los hijos necesitan amor y comprensión toda la vida.
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“Ser padre o ser madre implica mucho más que una receta de algo que uno quiere preparar y que le salga como uno quiere, implica alguien que es su propia persona, tiene su propia identidad, tiene su propio mundo, su propia vida y un valor innegable.
“Una madre no puede dejar de abrazar, de acoger, de proteger, de amar a todo ser humano que es perfecto tal y como vino, que no puede ser nunca el amor condicionado”, aseguró.