Los vecinos de San Juan de Dios de Desamparados se unieron al montón de comunidades que sufren con el agua.
La semana pasada varios lugareños reportaron que el agua estaba saliendo con un olor extraño y un color raro, por eso Acueductos y Alcantarillados (AyA) le pidió a los vecinos de calle Roble y calle Cementerio, del distrito desamparadeño, no tomar agua del tubo.
Luego de tomar acciones para hacer los análisis correspondientes, el domingo pasado el AyA le dijo a los vecinos de esos lugares que ya podían volver a tomar el líquido con toda tranquilidad, pero este lunes se volvieron a encender las alarmas, porque los lugareños volvieron a reportar un olor extraño, esta vez como a “cloaca”.
Incluso, algunas personas aseguran que se han visto afectadas con síntomas parecidos a los de una intoxicación por haber consumido el líquido.
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Juan Manuel Quesada, presidente del AyA, dijo este miércoles en la conferencia de prensa del Consejo de Gobierno que ya están trabajando en resolver el nuevo problema y que mientras tanto piden a la gente que no tomen del agua del tubo.
Están enviando camiones cisternas para que los lugareños puedan recoger agua para hacer frente a sus necesidades mientras se soluciona la situación.
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Quesada dijo que esperaba que los resultados de laboratorio del agua analizada estuvieran listos este mismo miércoles antes de que finalizara el día.
El AyA le pide a la gente que si detecta un olor extraño o color raro en el agua que les llega, hagan un reporte inmediato a las autoridades para que se hagan los análisis correspondientes.