Santa fiesta de la Divina Misericordia

Tres kilómetros al noroeste del centro de San Isidro del General, exactamente 300 metros al norte de la escuela del barrio Morazán de Pérez Zeledón, se ubica el único santuario en Costa Rica dedicado a la Divina Misericordia y por estos días está de tremenda fiesta porque este domingo 8 de abril se celebra, en todo el mundo, el Día de la Divina Misericordia, gracias a san Juan Pablo II, quien así lo estableció en el año 2000.

Doña Zaida Marín es parte del apostolado de la Divina Misericordia del santuario generaleño y nos contó que están sudando la gota gorda con todos los preparativos para este domingo, pero que lo hacen con mucho cariño, fe y devoción.

“Desde el 2009 está el santuario y fue en ese mismo año que nació el apostolado, somos como 25 personas comprometidas en mantener todo bien bonito todos los días porque se abre por las tardes para que el pueblo y quien guste, comparta su fe.

“Si bien este domingo es la gran fiesta anual, con una peregrinación que sale del cruce del Liceo Unesco, en el barrio Morazán de Pérez Zeledón, con la presencia de Radio Sinaí (103.9 FM), alabanzas y una misa que inicia las diez de la mañana, toda esta semana hemos recibido delegaciones de todo el país que celebran la novena con nosotros”, explicó doña Zaida.

El vicario del santuario, el padre Edgar Orozco, así como el párroco, padre Luis Picado, se han mostrado más que felices por la respuesta no solo del barrio Morazán y todo Pérez Zeledón, sino del país.

En el año 2000 el papa San Juan Pablo II canonizó a Santa Faustina (monja polaca que falleció en 1938) y durante la ceremonia declaró que cada segundo domingo de Pascua se celebraría en toda la Iglesia Católica el Domingo de la Divina Misericordia. Santa Faustina escribió en un diario todas las conversaciones que tuvo con Jesucristo en diferentes apariciones

El 30 de abril del 2000, el Papa proclamó el segundo domingo de Pascua como el “Domingo de la Misericordia Divina” para todo el mundo.

El santuario en Pérez Zeledón puso su primera piedra el 19 de abril del 2009 y el altar se consagró el 24 de enero del 2014. Es el primer templo en Costa Rica consagrado a la Divina Misericordia y el primero en tener una Reliquia de Santa Faustina en primer grado (un hueso de la religiosa). La reliquia la trajeron el padre Mario Segura, la señora Aura Segura y su esposo José Martín.

La reliquia fue donada por el Convento de la Congregación de las Hermanas de la Bienaventurada Virgen María de la Misericordia, en Cracovia, Polonia. La entrega se dio en Polonia el 21 de setiembre del 2012. Junto a la reliquia fue entregado el documento oficial de autenticidad. El domingo 3 de febrero del 2013 se realizó el acto oficial de entrega.