La Navidad es un tiempo en el cual las familias se preparan para reunirse, compartir regalos, comidas especiales y villancicos.
También reflexionan sobre el significado espiritual de la Navidad. Por eso, la gran mayoría de familias de nuestro país se esmeran en decorar su hogar con el “Pasito” o Portal de Belén.
Este simboliza el nacimiento del Niño Jesús, quien nos recuerda el mensaje de amor y perdón. La esperanza de una humanidad más solidaria y humilde, para que reine la paz.
LEA MÁS: Temas de Familia: Barras de fútbol y familia
Se espera que todo fluya en armonía, que los hogares tengan gente feliz y alegre en todo momento. Sin embargo, no siempre es real que los familiares se lleven bien. Lamentablemente, en esta época se dan escenas de niños asustados viendo a sus padres violentándose, ebrios o drogados, arruinando su Navidad para siempre. Otros se dejan llevar por el rencor, odio o venganza entre parientes y amigos.
Frente a este sombrío panorama aún existen estrellas llenas de luz, se inunda el planeta de una energía especial. La mayoría de las mentes desean los mejor. Qué bueno sería entonces aprovechar para cambiar. Prepararse para una gran reunión el día 24. Reunirse en estos días, hablar, perdonar los errores, llamar a los parientes y hacerlos partícipes de las actividades.
LEA MÁS: Temas de familia: Comer y gozar junto a los seres queridos
Pensar en los niños y con madurez, evitar borracheras desmedidas y otros abusos. Asumir que la Navidad es para ellos. Darles el mejor regalo: Paz y amor para la familia.