Un negocio muy bien pensado tiene a 25 pulseadores y a un empresario trabajando codo a codo. Todos salen ganando y nadie se maja la manguera.

La idea de Alejandro Ávila, director de Mercado 83, comenzó hace un año y está muy contento de verla hecha realidad.

Él abrió un local en Multiplaza Escazú y alquila campitos, o vitrinas, a pulseadores que ofrecen productos que dentro del recinto no tienen competencia.

Mariana García, por ejemplo, está toda contenta porque ahora tiene un lugar fijo en el que los clientes encuentran los productos que ella y un grupo de mujeres fabrican. Mariana es dueña de la empresita The Rainforest Lab, que hace champús y acondicionadores en barra libres de plásticos de un solo uso.

“En diciembre del 2018 fui a la primera feria y desde ese momento he buscado cómo ampliar mis canales de distribución, pero no tenía la solvencia para alquilar un local. Hace unos meses me contactaron de parte del proyecto de Mercado 83 (en Multiplaza Escazú) y me ofrecieron un espacio fijo para ofrecer mis productos y me mandé al agua.

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“Estoy muy contenta, la tienda se abrió el 4 de junio y traje mucha mercadería y ya he tenido que traer más porque se está vendiendo muy bien. Nuestros artículos son de calidad de salón, el champú cuesta ¢6 mil y el acondicionador ¢5 mil y duran dos meses”, contó.

Roberto Vargas y su esposa, María Lourdes Muñoz, también forman parte del proyecto, ellos venden bolsos para mujeres, los cuales son fabricados por privados de libertad de la cárcel de Cartago. Su empresa se llama FVM Bags.

“Nosotros estuvimos con un puesto en una feria Pyme que hubo a inicio de este año en Multiplaza Escazú y así conocimos el proyecto de la tienda para los emprendedores, nos pareció una buena opción porque ya mucha gente venía a buscarnos a este centro comercial.

“Tenemos bolsos para mujer, de los que se usan en el hombro. También mochilas de espalda, organizadores de cartera, organizadores de cables, canguros, todos de nylon e impermeables, además son livianos y el precio promedio de nuestros artículos es de ¢12 mil”, contó la pareja.

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Acercamiento con clientes

Ávila, de Mercado 83, nos amplió sobre su iniciativa. “Por lo general, las personas que tienen negocitos participan en ferias para dar a conocer y vender sus productos, pero con la pandemia esas ferias se suspendieron. Por eso nace la idea de crear tiendas con alma de mercado. A la vez, la tienda es un vitrina para encontrar nuevos clientes”, contó.

El local de Mercado 83 abrió en Multiplaza Escazú con productos de 25 pulseadores, es la primera de estas tiendas, pero se espera que en la primera semana de agosto abra otra en Plaza Lincoln y estudia la idea de poner una en Multiplaza Curridabat.

“Una de nuestras metas es acercar los emprendedores a los clientes, que conozcan cómo se hace la salsa que está comprando, por ejemplo. Para eso cada pequeño empresario capacita a los vendedores de la tienda para que ellos puedan decirle a los clientes qué ingredientes tiene cada producto, cuáles son sus beneficios, cuál es la historia del artículo, quién lo produce y todos esos detalles”, expresó Alejandro.

Sin pagar de más

Ávila asegura que el hecho de que la tienda esté en un mall, no hace que los productos sean más caros, ya que el compromiso es ofrecerlos exactamente al mismo precio que si los compran directamente al pulseador que los fabrica.

“Nos ha sorprendido el gran apoyo que estamos recibiendo de parte de la gente, eso nos motiva muchísimo para seguir adelante abriendo más tiendas de este tipo que apoyan a los negocios nacionales. Algunos de los emprendedores llevaron productos calculando que iban a venderse en unos 15 días y al cuarto día tuvieron que llevar más porque se están vendiendo muy rápido.

“Tenemos alimentos como salsas, pestos, mermeladas, snacks, bebidas alcohólicas y sin alcohol, opciones keto, libres de gluten, sin azúcar y veganas. Además, hay un espacio exclusivo para café de especialidad, regalos para los amantes del café. Hay un área llamada “Pequeñitas pero matonas”, que son marcas más pequeñas o necesitan menos espacio a la hora de exhibir, como algunas marcas de joyería, que son pequeñas en tamaño, pero grandes en calidad y hechas con amor”, contó.

Alejandro dijo que en los últimos 15 días han recibido 80 solicitudes de pulseadores que quieren unirse al proyecto para mostrar sus productos y están analizando una por una para ver cuáles pueden incorporarse.