EscucharCuatro de cada cinco trabajadores independientes están morosos con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Según estadísticas de la Dirección de Cobros de la Caja, eso son un total de 220.973.
Entre todos ellos, acumulan una deuda de 515.099 millones de colones.
La gran pregunta es, ¿por qué no pagan? En La Teja nos dimos a la tarea de conversar con varios trabajadores independientes para que nos contaran un poco sobre su situación.
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María José quien, para evitar que le caiga la Caja prefirió no dar su nombre real, es una de ellas.
Ella es dueña de un gimnasio y como apenas tiene cuatro meses de haber iniciado su negocito, las cuentas no le cierran para poder cotizar.
“En este país es demasiado caro emprender, entonces es complicado. Si te ponés a pagar eso, adicional hay que pagarle al INS, adicional vienen las patentes y otro montón de gastos, al final uno no da”.
Y si bien tiene planeado, en algún momento, cotizar a la Caja, tiene claro que ese futuro no está nada cercano
Similar es el caso de Josué, quien también prefirió no dar su nombre real.
En su caso, si bien comenzó a ser asalariado hace poco más de un año, ahora anda con la cebeza abajo porque, a lo largo de cuatro años, trabajó como independiente y no cotizó.
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“No coticé porque no me daba el bolsillo. Tenía muchos gastos, con costos estaba llegando a final de mes y perder un porcentaje de mi salario no sonaba como algo viable.
“Claramente vivía con el miedo de tener algún accidente o necesitar alguna cirugía de último momento, porque tampoco podía darme el lujo tener ahorros, entonces sí vívia con mucho miedo de que me pasara algo y no poder ir a la Caja.
“Tenía seguros privados y cuando tenía que hacerme alguna revisión iba por fuera, pero también me salía muy caro. Era una por otra, o perdía una parte de mi salario o, cada cierto tiempo me llevaba un bombazo pagando cuentas de doctores”, lamentó.
El pulseador dice que en algún momento sacó cuentas y debía más de un millón de colones, entonces, prefirió bajar la cabeza y no comerse esa bronca.
Al otro lado de la moneda tenemos a Joselyn, una vecina de Liberia que si bien sí está en regla, no es por las razones que usted se imagina.
“Yo cotizo porque en mi brete me exigen estar inscrita en Hacienda y en la CCSS. Siempre pago tarde, pero siempre pago”, dijo entre risas, antes de contarnos que mes a mes debe pagar cerca de 70.000 colones.
Lo curioso es que cuando le preguntamos si cotizaría por sí misma y no por obligación, nos llevamos una sorpresa.
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“De fijo no. Si yo realmente pagara lo que tengo que pagar, preferiría un seguro privado”, admitió.
“Amo la Caja, pero se queda corta en muchas cosas. Llevo un mes intentando conseguir una cita de rutina y no lo he logrado. He tenido que hacerme chequeos y pagarlos por privado, porque sé que me tocaría esperar meses o años”.
En La Teja tramitamos una serie de consultas al departamento de prensa de la CCSS, en específico si ellos consideran que esta deuda es irrecuperable y cuáles son los mecanísmos que ellos aplican para cobrar a los independientes morosos pero, al cierre de esta nota, no hubo respuesta.
