Fabricio Alvarado llegó a dar su discurso de derrota con el mismo entusiasmo como si hubiera ganado.
El candidato del Partido Restauración Nacional ingresó a la tarima colocada en el Hotel Parque del Lago, cerca de La Sabana, con una sonrisa bien grande, se hincó y señaló al cielo, tal cual lo hace Keylor Navas en la línea de la portería antes de empezar una mejenga.
"Gracias Dios", decía Fabricio mientras señalaba al cielo.
Al poner de pie, Fabricio explicó su reacción a los cientos de sus seguidores.
"No estamos tristes porque hicimos historia, porque nuestro mensaje tocó las fibras más profundas de este país, pase lo que pase para Dios es la gloria, y estamos tranquilos porque nuestro trabajo fue digno y limpio y nuestro mensaje sí caló en las elecciones", dijo el exdiputado de Restauración Nacional.
Fabricio dio un discurso corto, el cual arrancó a las 8:40 p. m. y ya a eso de las 8:52 p. m. finalizó.
El candidato del Restauración confirmó que llamó a Carlos Alvarado para felicitarlo, en el preciso momento en el que el Tribunal Supremo de Elecciones dio el primer corte.
"Felicito a Carlos Alvarado, una vez dado los resultados lo llamé por teléfono le dí mis felicitaciones, le dije que puede contar con nosotros para caminar este país porque esto no es un tema de partidos políticos sino del país, yo sé que Carlos también ama a su país", añadió.
Fabricio aprovechó para agradecerle a todas las personas que lo apoyaron en toda esta campaña en la cual confirmó que sufrió.
"De todo corazón, quiero agradecerle a Dios y cada uno de ustedes los que con mística hicieron su propia bandera, hicieron sus propias camisetas, trabajaron con todo su corazón, no ganamos las elecciones, pero creo que las podemos enfrentar este resultado con la frente en alto, vamos a seguir trabajando para que el sol siga brillando en este país", expresó.
Además, Fabricio dijo que, pese a que perdió, no va a bajar los brazos y seguirá luchando por un mejor país desde donde sea que pueda.
"Ellos (PAC) no son los adversarios, los adversarios son la corrupción, la inseguridad, la ineficiencia, la vagabundería, esos son los gigantes que vamos a derrotar desde donde quiera que estemos, tal y como se lo dije a don Carlos", concluyó.
Fiesta se apagó rapidito
El Tribunal Supremo de Elecciones apagó la fiesta que tenían los seguidores del Partido Restauración Nacional (PRN).
A las 8:10 p. m. la entidad reveló que el PAC llevaba la delantera con un 60,6% contra un 39,4% de Fabricio Alvarado, con un corte de un 90% de las mesas revisadas, lo que bajó el ánimo de los cientos de personas que desde las 6 de la tarde estaban gritando, bailando y ondeando las banderas azules con amarillo.
Yorleny González, una de las seguidoras de Fabricio dijo que ahora no queda más que aceptar el resultado.
“No sé que fue lo que pasó, pero ahora no queda más que pedirle a Dios que ilumine al nuevo presidente porque Costa Rica es de todos”, dijo desmotivada la mujer, quien es vecina de Alajuela.
Una de las familias que llegaron a festejar lo que ellos consideraban un triunfo, lo hizo desde Guadalupe.
Se trata de Natalia Bogle, su esposo Jonathan Alvarado y el hijo de ambos, el pequeño Franco, de solo un año y 10 meses, quien pese a su corta edad estuvo bien despabilado.
Natalia dice que lo que la convenció de votar por Fabricio es la manera en la que el candidato defiende a la familia.
“Necesitamos alguien como él que defienda la Constitución Política de los cambios que quieren hacer y también necesitamos a alguien que no conozca la corrupción”, dijo la joven mamá.
“No hemos trabajado en la campaña, pero si ganamos unos 15 votos en la familia y eso nos hace sentirnos satisfechos. Hoy quisimos venir a esperar los resultados aquí y dormimos a Franco toda la tarde para que aguantara”, agregó la mujer.
Jonathan aseguró que le dio mucha confianza el equipo económico que tenía Fabricio.
“Para mí el mejor plan económico es el del Partido Restauración Nacional y por estoy decidimos venir a esperar los resultados aquí”, expresó el hombre.
René Barboza, quien estuvo animando la noche dijo después de recibir los resultados que sepultaban las esperanzas de los seguidores del partido del sol y que “perdieron con las manos limpias” y eso era motivo de orgullo para seguir luchando por el país.