Un entero del gordo de este año cuesta casi la mitad del salario mínimo de algunos pulseadores de este país.
La Junta de Protección Social sacó este martes a la venta la lotería navideña, la cual se jugará el 15 de diciembre y entregará el mayor premio de la historia (¢8.000 millones repartidos en cuatro emisiones de 2.000 millones cada una).
Sin embargo, ese suculento premio aumentó el costo del pedacito, que pasó de dos rojos a ¢2.500, mientras que el entero, que trae 40 fracciones, cuesta nada más y nada menos que ¢100 mil del alma, lo que para muchos podría ser casi la mitad de lo que ganan.
Por ejemplo, según la lista de salarios del Ministerio de Trabajo de agosto pasado, si un albañil trabaja durante un mes para el mismo patrono recibirá un sueldo de ¢349.623,81, mientras que el salario mínimo de un verdulero, una recepcionista y un bodeguero es de ¢332.589,87.
Alejandra Espinoza, quien se dedica a vender comida en su casa, en Concepción Abajo de Alajuelita, es un claro ejemplo de lo que decimos y aunque considera justo el precio, por el premio que dan, es consciente que por lo que gana, no puede aspirar al entero.
“En los últimos años todo ha aumentado de precio, el costo de la vida es más caro y hasta los precios de la lotería tienen que subir. Considero que cien mil colones por entero es lo justo, tomando en cuenta lo que uno gana, pero en mi caso me la jugaré con cuatro pedacitos y si gano, arreglo mi casa y hago crecer mi negocio de venta de comida”, manifestó.
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Sin embargo, habrá más de uno que, pese a que ganan poquito, se las ingeniarán para arriarle al gordo como Dios manda.
Ese es el caso de un trabajador del sector construcción. Su esposa, quien no quiso ser identificada, comentó que su marido si tiene que hacer más horas extra en los últimos meses del año para comprarse un gemelo (dos enteros), las hace.
“A él no le importa si el precio es alto o no. Recuerdo que hace muchos años se gastó quinientos mil colones en la navideña y de esa inversión recuperó como cien mil colones.
"Él juega lotería todas las semanas y no toma en cuenta el precio del entero, porque sabe que si gana invertirá en nuestra casa y en la educación de nuestras hijas y ya está guardando plata para comprar su par de enteros lo más pronto posible”, aseguró la señora.
No se endeude
Si usted es de esos que, pese a que la cobija no le da pa’ tanto, igual le gusta jugar, el mejor consejo es que, si lo va a hacer, hágalo responsablemente.
Dagoberto Hidalgo, subgerente de negocios de Mucap recomendó a los compradores de lotería no endeudarse para apostarle a la suerte.
“Hay que tener presente que los premios de la lotería son muy atractivos, pero los compradores no pueden perder la cabeza y más si ya tienen alguna obligación, como deudas, pago de casa o los gastos que hacen cada mes.
“Algunas personas hacen un ahorro para comprar este tipo de loterías a final de año y eso es una práctica sana. Considero que en este tema lo importante es no asumir nuevas deudas que hagan que la persona cada vez tenga menos dinero para hacerle frente a sus obligaciones”, señaló.
La Junta se defiende
El Departamento de Mercadeo de la Junta de Protección Social (JPS) informó que los precios de la lotería se ponen luego de hacer estudios de mercado.
“Se busca el balance entre el premio aspirado por las personas, el precio que permita cumplir con esa aspiración y se consideran las necesidades de financiamiento de los programas sociales”, expresó la Junta vía correo electrónico.
Además, la Junta señaló que los precios de los billetes del sorteo navideño no aumentaban de precio desde diciembre del 2016.
“Hace un año, tanto compradores como vendedores criticaron que el sorteo navideño estaba estancado, no gustaba que el sorteo no creciera en tanto tiempo. El precio anterior de ¢2.000 por fracción solo podía aumentarse a ¢2.500 por asuntos de manejo de efectivo para los vendedores, un precio de ¢2.100 o ¢2.300 colones no es práctico para la comercialización de un sorteo”, manifestaron en el documento.