Nacional

Vecinos de Desamparados hacen filones por agua, lo que aumenta las amenazas de contagio

Dos camiones cisterna han estado abasteciendo en San Rafael Abajo, que lleva cerca de 24 horas a a secas

EscucharEscuchar

Los vecinos de San Rafael Abajo de Desamparados están preocupados porque llevan más de 24 horas sin lavarse las manos, pero además, otra situación que es alarmante es que cuando van a recoger agua de los carros cistena, las pelotas en las filas hacen que no se respete el distanciamiento de al menos metro ochenta, para evitar el contagio del coronavirus. El Ministerio de Salud reporta 44 casos de coronavirus en este cantón.

Además de esta comunidad se han visto afectados otros barrios cercanos que aseguran que no tienen el preciado líquido.

La última gota de agua llegó a las 9 de la mañana del sábado, la mañana de este domingo dos camiones cisterna empezaron a repartir agua, uno en las cercanías del parque de perros.

“No nos avisaron que el agua se iba a ir, cuando nos dimos cuenta llegaba un chorrito y apenas pudimos llenar la olla de presión, la verdad es que nos preocupa mucho porque con esto del coronavirus hay que lavarse las manos y la cara y esa agua ya no nos alcanzó para hoy”, dijo uno de los vecinos de apellido Salas.

Por su parte, doña Karla Bustos, vecina del barrio Vizcaya, aseguró sentirse muy angustiada porque no saben a qué hora volvería este domingo el preciado líquido.

“Yo salí a recoger un poco con el camión, pero a uno le da miedo hasta salir”, dijo.

La principal preocupación para los vecinos es que hay muchos niños pequeños y algunos adultos mayores encamados.

La intervención de los líderes comunales permitió que los camiones cisterna llegaran; sin embargo, algunos vecinos han tenido miedo de salir por las enormes filas que se hacen para llenar los tarros.

Consumo alto

La oficina de prensa de AyA informó que el problema en San Rafael Abajo en Desamparados se debe a que este sábado 18 de abril se registraron consumos muy altos de agua en todo el Acueducto Metropolitano, lo que causa que el escaso líquido disponible no alcance para cubrir a todos los sectores.

En el caso específico de Desamparados, los reportes de faltantes empezaron a llegar alrededor de las 7:30 p.m. del sábado.

Desde este domingo a las 7 a.m. el AyA mandó cisternas para abastecer a la población. En este momento, se cuenta con 6 cisternas con una capacidad total de 87.000 litros que se recargan durante el día.

Debe tomarse en cuenta que, debido a la escasez de lluvias de los años 2018 y 2019, nuestras fuentes de agua (ríos y pozos) están disminuidos. De esta forma, el mes de marzo de este año fue el tercero con menor producción de agua potable en el AyA de los últimos cuatro años, apenas alcanzó los 5.775 litros por segundo (l/s). Este faltante se mantiene a pesar de que la institución ha inyectado nueve nuevos pozos desde el 2017 para un total de 720 l/s adicionales.

AyA informó que en la mañana del domingo el servicio se empezaba a restablecer, poco a poco, en algunos puntos. Sin embargo, normalmente como hubo faltante de agua, cuando regresa la gente guarda o la utiliza de más, por lo que tarda más tiempo en recuperarse en todo el sector.

“Los sábados normalmente tenemos consumos muy altos porque la gente realiza varias tareas de aseo, como lavar ropa o ducharse varias veces, e incluso usa el agua para recreación. Por eso es importante realizar un llamado al uso responsable del agua en todo el país, para priorizar el agua para tareas esenciales como consumo y aseo”, dijo AyA.

Silvia Coto

Silvia Coto

Periodista de sucesos y judiciales. Bachiller en Ciencias de la Comunicación Colectiva con énfasis en Periodismo. Labora en Grupo Nación desde el 2010.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.