Los habitantes de Picagres, Llano Grande y Piedras Negras de Mora ya no tendrán que dar un vueltón de casi 10 kilómetros para llegar a Turrubares, ya que el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) les instaló un puente que comunicará a todas esas localidades.
La estructura anterior había sufrido daños de consideración en noviembre del año anterior debido al paso arrollador de la tormenta tropical Nate, que afectó a todo el territorio nacional y que dejó como saldo 11 muertos.
Sin embargo, fue en abril que el puente terminó cayéndose cuando un tráiler iba pasando.
La nueva construcción, ubicada en Picagres, mide 36 metros de largo y tiene capacidad para aguantar 40 toneladas, es de un carril.
Jesús Arriola, un vecino que vive a 150 metros del puente, está en una pura contentera ya que esto le ahorrará tiempo en los viajes que hace.
Él explicó que la ruta que une el puente es de las más usadas por los lugareños, ya que de ambos lados hay escuelas, colegios, bancos, clínicas y lugares de trabajo.
“Estamos muy contentos y agradecidos ya que en mi caso era muy necesario, todos vamos a resultar beneficiados con esto porque vamos a tener más tiempo para llegar a nuestros destinos”, afirmó.
Este enlace también conecta con la vía de Turrubares que se dirige hacia la provincia de Alajuela.