″¿Qué va a pasar con mi hijo de ahora en adelante?”, es la gran pregunta que se hace don Jorge Valverde, quien es de Desamparados y dejó en los portones del Liceo de Costa Rica a su hijo que está en sétimo, después de una semana que estuvo cerrado por el fallecimiento de Sebastián Díaz, alumno de sétimo, quien fue atropellado por el tren en un ambiente de bullying.
Don Marco Vinicio Naranjo, el director del Liceo, le responde a don Jorge que puede estar tranquilo porque se ha trabajado integralmente en la semana pasada para que los profesores puedan trabajar con los 800 alumnos que día a día llenan las aulas de la institución.
Todos los profesores fueron tratados por las autoridades del ministerio de Educación en lo que se llama primeros auxilios psicológicos, para que puedan ayudar a sus alumnos a superar el trauma de la muerte de Sebastián.
Por la tarde de este lunes 12 de marzo, ingresarán el restos de estudiantes y al menos durante dos semanas estarán a portón cerrado en diferentes charlas y actividades para despejarlos mentalmente.
Varias madres de familia que no dieron su nombre, lloraron después de dejar a sus hijos de sétimo. Una que solo nos dijo que se llama Hazel nos comentó que su gran dolor es no saber cómo estará su hijo en el colegio porque ella le tiene horror al bullying, sin embargo, confió en que los profes lograrán cambiar el ambiente a algo bien positivo.
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