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Este domingo por la mañana, Abigail llegó al Parque Central de San José en compañía de su mamá Yessenia, para participar de la marcha conmemorativa por el Día Internacional de la Mujer.
“Nosotras nos venimos a manifestar por todo lo que ha pasado en el país y porque estoy orgullosa de mi mamá, quien por muchos años fue víctima de violencia y me siento orgullosa de estar con ella marchando y de no venir sola”, expresó la joven.
Doña Yessenia, quien prefirió no dar el apellido por seguridad, comentó que por muchos años fue maltratada por el padre de sus hijos y hace 10 años, pensando en un mejor futuro para sus pequeños decidió separarse y romper con el ciclo de violencia.
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“Un día me dije que debía darle un ejemplo a mis hijos y la verdad es que uno no debe permitir abusos por estar con una pareja, porque no es solamente el abuso físico y verbal para uno, también es para ellos”, expresó.
La señora lamentó que otras mujeres no tuvieran la suerte de ella y a aquellas que en este momento pasan por una situación de violencia les mandó un mensaje de esperanza.
“Sé que muchas tienen miedo, pero las invito a buscar ayuda, Dios le pone a uno muchos ángeles en el camino y es posible salir adelante y no permitir más abusos. Yo un día decidí no permitirlo más y afortunadamente aquí estoy”, detalló.
Así como ellas, decenas de personas, en su mayoría mujeres, llevaron mensajes en apoyo a aquellas mujeres que sufren violencia, que han muerto en manos de sus parejas y también marcharon por la joven Allison Bonilla, que está desaparecida desde el miércoles anterior.
La marcha inició a eso de las 10:30 de la mañana, en el Parque Central y finalizó en la plaza de la Democracia. Muchas llegaron con mensajes muy claros pidiendo un alto a la violencia e igualdad de derechos en temas laborales y acceso a una vivienda digna.
“Esta es una lucha de años, la discriminación sigue en los trabajos, en las escuelas, en la misma familia y es importante que hombres y mujeres aprendan a que todos debemos ser tratados de la misma manera. Las mujeres no pedimos más, lo que buscamos es igualdad”, dijo Gabriela Pérez, quien llegó acompañada de su hija Sofía, de 8 años.
