Carolina Rodríguez es una costarricense que desde el 2011 vive en Bloomington, Illinois, a dos horas de Chicago, una de las ciudades de Estados Unidos donde se han registrado temperaturas más bajas que en la Antártida.

Debido a un fenómeno llamado vórtice polar, que arrastra aire frío desde el Polo Norte y lo encierra en países cercanos como Canadá y Estados Unidos, en Bloomington y Chicago el termómetro marcó el jueves 50 grados bajo cero.

Carolina, oriunda de San Pedro en Montes de Oca, nos atendió este viernes vía telefónica (por la aplicación de WhatsApp) y nos contó que estaba en el sótano de su casa porque es ahí donde se siente menos frío.

En broma dijo que está a punto de convertirse en pingüina pues ha soportado condiciones climatológicas que en Costa Rica jamás imaginó que existían.

Carolina es artista plástica y nos contó que el miércoles recién pasado salió con el pelo mojado a hacer un mandado y en cuestión de dos minutos se le congeló. Esto le despertó la curiosidad, así que un día después junto a su hija Maya Valverde, de 7 años, hizo varios experimentos en el patio de la casa.

Uno de ellos fue tratar de cocinar un huevo usando el frío, pues había escuchado que eso era posible y el resultado la sorprendió.

“Hice un hueco en la nieve, pusimos el huevo y a los siete minutos se congeló, tenía apariencia de un huevo frito porque sus orillas estaban como cocinadas. No lo probé (risas) porque estaba congelado, pero es impresionante ver cómo pasan estas cosas gracias a las bajas temperaturas”, detalló.

La curiosidad de madre e hija no se quedó allí. Maya insistía en realizar otro tipo de pruebas y decidieron lanzar agua al aire para saber qué pasaba.

“Cuando la tiré se evaporó, salió humo del mismo vapor y cayó como si fuera nieve. Pensé que se iba a convertir en hielo o que iba a caer agua pero no fue así. También tiramos burbujas que hicimos con jabón y se congelaron pero se hicieron como cuando la goma se seca”, explicó.

Tres mudadas para el frío

Carolina explicó que al momento de hacer los experimentos se embarcó, ya que fue el mismo día que la temperatura llegó a límites extremos.

“Salí sin guantes y los dedos se entumen, la cara a uno le duele porque aunque está haciendo frío, se le quema”, relató.

Cuenta que para salir necesita ponerse varias prendas para, literalmente, no morirse del frío.

“Me pongo una blusa, luego otras dos pero de manga larga y un abrigo grueso, después una licra y dos pantalones, dos pares de medias, una botas especiales, guantes, bufanda y gorro, solo así se puede salir. Cuando uno llega a una tienda hay que quitarse la ropa que se lleva de más porque hay calefacción”.

Explica que desde el lunes pasado lo más complicado ha sido manejar, primero por el estado de las calles y luego porque dentro del carro el frío se siente.

“A las calles no les echan sal (para que los carros no resbalen) entonces es difícil porque me patina", comentó.

Tuberías congeladas

Esta no es la primera vez que Carolina vive un fenómeno como este. En el 2013 las temperaturas bajaron tanto que el agua que pasaba por la tubería de su casa se congeló.

“Esa vez todo se congeló, nos quedamos sin agua. Con este vórtice optamos por dejar la llave del agua abierta para que corriera y no se congelara”, explicó.

Carolina visitará Costa Rica en marzo de este año, un mes en el que hay bastante sol. Así compensará los fríos que ha experimentado.

De acuerdo con los Servicios de Meteorología de Estados Unidos a partir de este lunes y martes se espera que la temperatura se encuentre entre los 0 grados y los 15 grados en Canadá y en Estados Unidos.